REUNION ALGUNOS DE LA OTRA-ALGUNOS DELEGADOS CND
ONG piden al Senado de la República solucionar el conflicto en el estado de Oaxaca
Lesly Mellado May
Solidaridad con el pueblo de Oaxaca, condena a la amenaza del uso de la fuerza pública en el estado vecino y una exigencia de libertad para los presos de Atenco fue el acuerdo al que llegaron las organizaciones de izquierda adheridas a la otra campaña y también a la Convención Nacional Democrática.
Esto, como parte de las conclusiones del foro “¿Luchar juntos?, resistencia y rebeldía”, organizado el sábado pasado en el Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP).
Un documento elaborado por el centenar de asistentes al encuentro es una carta dirigida al Senado de la República donde se pide dar solución pacífica al conflicto en el estado de Oaxaca.
“Desde el 14 de junio del presente año los mexicanos hemos atestiguado la incapacidad del gobierno del estado de Oaxaca, así como también del propio gobierno federal, para coadyuvar a resolver la situación que atraviesa el pueblo de esa entidad hermana”, reza el documento.
“A lo largo de estos meses se han multiplicado las agresiones a los habitantes, por parte del gobernador Ulises Ruiz Ortiz, así como la violación sistemática de los derechos civiles y políticos más elementales tutelados por nuestra Constitución”.
“Los esfuerzos del diálogo impulsados por la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) se han visto saboteados reiteradamente por las instituciones responsables de escuchar y resolver el conflicto. Como resultado de esta situación, la violencia institucionalizada ha producido heridos, muertes y presos políticos entre ciudadanos integrantes de la APPO”.
“Este clima de violencia amenaza con extenderse mediante una acción que involucraría a fuerzas militares federales con alcances incalculables para la preservación de la integridad física de toda la población”.
Ante estos hechos y circunstancia, exigen que la Cámara de Senadores adopte las resoluciones necesarias e inmediatas con el objeto de detener cualquier agresión contra el pueblo de Oaxaca, Atenco y de otros lugares del país.
Además, “la disolución de los poderes en el estado de Oaxaca dada su incapacidad de garantizar un clima de gobernabilidad y de respeto a los derechos más elementales de todos los ciudadanos de esa entidad”.
Piden a los legisladores “apremien a las autoridades judiciales para que procedan en contra de los responsables de las agresiones que durante meses se han desatado en contra de los militantes de la APPO y en general de la gente de Oaxaca”.
Por último, les manifiestan su decisión de “permanecer vigilantes de las resoluciones que esa soberanía adopte, esperando que las mismas contribuyan a resolver el conflicto en beneficio de los ciudadanos de esa entidad”.
Puebla, en resistencia y rebeldía
A la par del documento que será entregado en el Senado de la República, las organizaciones sociales reunidas el pasado sábado en la UAP hicieron una convocatoria a la sociedad poblana para rechazar la intervención policiaco y militar en Oaxaca.
“Los asistentes al seminario “¿Luchar juntos?, resistencia y rebeldía” estamos preocupados por la escalada de violencia en el estado de Oaxaca. Por esta razón hacemos un llamado urgente a la sociedad mexicana a manifestarse en todos los espacios posibles para detener la represión policiaca y militar del gobierno federal de Vicente Fox, como lo hizo en Atenco”.
“Rechazamos de manera categórica las formas represivas del Estado para dar solución a los problemas graves que aquejan a la población de Oaxaca, de la cual, mujeres y niños representan los sectores más vulnerables”, asientan.
“Consideramos que un primer paso para detener la violencia contra los pueblos de Oaxaca es la renuncia o destitución inmediata del gobernador Ulises Ruiz Ortiz. Su salida abriría las posibilidades de discusión y negociación para resolver los problemas que generaron el conflicto, entre ellos, la alta marginación, la discriminación de los pueblos indígenas, el incremento de presos políticos. Es necesario que no haya más derramamiento de sangre ni que se sigan violando los derechos esenciales de la vida política”.
“Queremos manifestar que la situación oaxaqueña es una expresión más de las prácticas de corrupción, impunidad, fraude electoral, con las que opera el Estado para proteger a gobernadores como Mario Marín, Fidel Herrera, o el caso mismo de Felipe Calderón”, concluye el documento”.
Como primera acción de solidaridad poblana hacia los oaxaqueños, las organizaciones no gubernamentales organizan para mañana martes 10 de octubre la salida de una brigada de “escudos humanos” para evitar la entrada de la fuerza pública a los plantones de la APPO.
Además, el jueves 12 de octubre estarán en el zócalo de la capital poblana recolectando víveres y dinero en efectivo para ayudar a la resistencia oaxaqueña.
Lesly Mellado May
Solidaridad con el pueblo de Oaxaca, condena a la amenaza del uso de la fuerza pública en el estado vecino y una exigencia de libertad para los presos de Atenco fue el acuerdo al que llegaron las organizaciones de izquierda adheridas a la otra campaña y también a la Convención Nacional Democrática.
Esto, como parte de las conclusiones del foro “¿Luchar juntos?, resistencia y rebeldía”, organizado el sábado pasado en el Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP).
Un documento elaborado por el centenar de asistentes al encuentro es una carta dirigida al Senado de la República donde se pide dar solución pacífica al conflicto en el estado de Oaxaca.
“Desde el 14 de junio del presente año los mexicanos hemos atestiguado la incapacidad del gobierno del estado de Oaxaca, así como también del propio gobierno federal, para coadyuvar a resolver la situación que atraviesa el pueblo de esa entidad hermana”, reza el documento.
“A lo largo de estos meses se han multiplicado las agresiones a los habitantes, por parte del gobernador Ulises Ruiz Ortiz, así como la violación sistemática de los derechos civiles y políticos más elementales tutelados por nuestra Constitución”.
“Los esfuerzos del diálogo impulsados por la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) se han visto saboteados reiteradamente por las instituciones responsables de escuchar y resolver el conflicto. Como resultado de esta situación, la violencia institucionalizada ha producido heridos, muertes y presos políticos entre ciudadanos integrantes de la APPO”.
“Este clima de violencia amenaza con extenderse mediante una acción que involucraría a fuerzas militares federales con alcances incalculables para la preservación de la integridad física de toda la población”.
Ante estos hechos y circunstancia, exigen que la Cámara de Senadores adopte las resoluciones necesarias e inmediatas con el objeto de detener cualquier agresión contra el pueblo de Oaxaca, Atenco y de otros lugares del país.
Además, “la disolución de los poderes en el estado de Oaxaca dada su incapacidad de garantizar un clima de gobernabilidad y de respeto a los derechos más elementales de todos los ciudadanos de esa entidad”.
Piden a los legisladores “apremien a las autoridades judiciales para que procedan en contra de los responsables de las agresiones que durante meses se han desatado en contra de los militantes de la APPO y en general de la gente de Oaxaca”.
Por último, les manifiestan su decisión de “permanecer vigilantes de las resoluciones que esa soberanía adopte, esperando que las mismas contribuyan a resolver el conflicto en beneficio de los ciudadanos de esa entidad”.
Puebla, en resistencia y rebeldía
A la par del documento que será entregado en el Senado de la República, las organizaciones sociales reunidas el pasado sábado en la UAP hicieron una convocatoria a la sociedad poblana para rechazar la intervención policiaco y militar en Oaxaca.
“Los asistentes al seminario “¿Luchar juntos?, resistencia y rebeldía” estamos preocupados por la escalada de violencia en el estado de Oaxaca. Por esta razón hacemos un llamado urgente a la sociedad mexicana a manifestarse en todos los espacios posibles para detener la represión policiaca y militar del gobierno federal de Vicente Fox, como lo hizo en Atenco”.
“Rechazamos de manera categórica las formas represivas del Estado para dar solución a los problemas graves que aquejan a la población de Oaxaca, de la cual, mujeres y niños representan los sectores más vulnerables”, asientan.
“Consideramos que un primer paso para detener la violencia contra los pueblos de Oaxaca es la renuncia o destitución inmediata del gobernador Ulises Ruiz Ortiz. Su salida abriría las posibilidades de discusión y negociación para resolver los problemas que generaron el conflicto, entre ellos, la alta marginación, la discriminación de los pueblos indígenas, el incremento de presos políticos. Es necesario que no haya más derramamiento de sangre ni que se sigan violando los derechos esenciales de la vida política”.
“Queremos manifestar que la situación oaxaqueña es una expresión más de las prácticas de corrupción, impunidad, fraude electoral, con las que opera el Estado para proteger a gobernadores como Mario Marín, Fidel Herrera, o el caso mismo de Felipe Calderón”, concluye el documento”.
Como primera acción de solidaridad poblana hacia los oaxaqueños, las organizaciones no gubernamentales organizan para mañana martes 10 de octubre la salida de una brigada de “escudos humanos” para evitar la entrada de la fuerza pública a los plantones de la APPO.
Además, el jueves 12 de octubre estarán en el zócalo de la capital poblana recolectando víveres y dinero en efectivo para ayudar a la resistencia oaxaqueña.
