Pruebas del Fraude - No quieren escuchar o no sabemos expresarnos
René Sánchez Galindo
14 de agosto de 2007
Aprovecho este espacio para disentir de lo publicado por mi otrora profesor de Filosofía del Derecho, Rodrigo Saldaña, quien también publica en este diario digital “e-consulta”, espacio que también me brindan algunos amigos “blogueros”.
Mi profesor de Filosofía del Derecho en los 90s, Rodrigo Saldaña, es de los profesores, que cuento con los dedos de una de mis manos, que escucharon mis dudas y planteamientos. Por ello es que me atrevo a disentir.
Hace un mes aproximadamente se publicó en el espacio de Opinión de este medio digital “e-consulta” la colaboración titulada “Los caminos de la ley y el acuerdo”, suscrita por Rodrigo Saldaña. En ella se afirma que:
“…Según el Dr. (José Antonio) Crespo, como el margen de error de una calificación electoral es superior al de la victoria de Felipe Calderón Hinojosa en 2006, ésta queda en duda. Si esto fuera cierto el COFIPE debiera ordenar automáticamente una segunda vuelta en estos casos… debió haberlo dicho, no ahora, sino en la época en que se estaba redactando el COFIPE en el Congreso de la Unión ”.
Rodrigo Saldaña omite en su opinión el trabajo ciudadano, gratuito, profesional y científico que realizó el grupo coloquialmente conocido como “los matemáticos”, donde también participó una organización civil, la “tv ciudadana”, un investigador en Derecho de la UNAM y este “opinador”.
Disiento de lo afirmado: no es jurídicamente necesario que para hacer valer la citada hipótesis se requiera de una segunda vuelta electoral y tampoco es cierto que esta hipótesis no se argumentara en su momento.
Por supuesto que se dijo en su momento. Es más, no sólo se dijo en su momento, sino que se presentaron las pruebas científicas al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (trife) el 30 de julio de 2006, seis días antes de que se negara la petición de hacer un recuento total de las casillas.
Y afirmo que ese era el momento y no 1996, cuando se discutió el COFIPE, porque los propios magistrados y magistrada del trife habían resuelto en 2004 que el legislador no está obligado a “…establecer un catálogo exhaustivo de posibles situaciones de tal naturaleza, pues cabría la posibilidad de que omitiera una o múltiples circunstancias que derivaran en que se pusiera en entredicho la certeza de los resultados de una elección, y que por no encontrarse expresamente previstos, escaparan a la posibilidad de que se realizara un recuento de los votos, a pesar de tratarse de un caso que pusiera en duda el resultado del cómputo levantado por los funcionarios de casilla…”
Con base en esa opinión del trife tomada por unanimidad dentro del expediente con número de registro: SUP-AES-009/2004, y considerando que se trata de un tribunal que resuelve sobre la constitucionalidad de los actos (no de las leyes) electorales, debió ordenar el recuento total de los votos.
Ello entre otras cosas, por la tesis que retomó Dr. José Antonio Crespo, misma que fue presentada como “prueba para mejor proveer” dentro del llamado “recurso madre” con número de expediente SUP-JIN-212/2006, junto con otros siete dictámenes suscritos bajo protesta de decir verdad por diversos científicos, investigadores e ingenieros.
El Dr. Wolf Luis Mochán Backal , investigador del Centro de Ciencias Físicas de la UNAM y profesor de la Facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma de Morelos, declaró textualmente: "… considero que no será razonable afirmar que el resultado de la elección tiene un margen de error significativamente inferior a 0.3%. Más bien, creo que la incertidumbre en el resultado del PREP y del CD (conteo distrital) es muchísimas veces mayor a dicho valor. Dado que la diferencia reportada entre los porcentajes de la votación recibidos por FC y por AMLO son menores a 0.6 %, la incertidumbre es intolerablemente alta para poder definir de manera certera y libre de duda al ganador de la elección presidencial. Por lo tanto, no tengo duda en recomendar que se ordene un recuento de todas las boletas en condiciones tales que garanticen una incertidumbre significativamente menor a la diferencia de votos entre los contendientes y que tengan una absoluta credibilidad…”
Cuando junto con el Grupo de Tecnología Alternativa, S.C. elaboramos la solicitud de “diligencias para mejor proveer” le expusimos al Dr. Mochán y a los demás valientes investigadores que sus estudios debían suscribirse bajo protesta de decir verdad, que debían de estar disponibles para ratificarlos ante el trife y que podrían ser cuestionados en una audiencia judicial por asesores del actual titular del régimen federal en el poder. Ellos aceptaron sin ningún temor.
Cuál fue la respuesta del trife. Ninguna, ni siquiera nos respondieron, ninguna mención ni en la sentencia interlocutoria, que negó el “voto por voto”, ni en las sentencia que resolvió el “recurso madre”, ni en la calificación de la elección presidencial; vaya, ni siquiera emitió un acuerdo que respondiera esta petición ciudadana con más de mil firmas. Violando, por supuesto, nuestro derecho constitucional de petición.
Ante ello, y como ciudadanas y ciudadanos movidos por el amor a nuestra patria y con la confianza que nos dio el actuar con apego a la ley, promovimos denuncia de juicio político en contra de los seis magistrados y la magistrada de trife, que entonces violaron nuestros derechos. Esta denuncia la ratificamos más de 70 personas a pesar de que en la Cámara de Diputados nos impedían el paso y a pesar de la torrencial lluvia que cayó sobre los denunciantes; quienes lograron entrar por la presión que el Dr. Jaime Cárdenas, otro de los denunciantes, la Doctora Josefina Mena del Grupo de Tecnología Alternativa y los reporteros de los medios de comunicación hicieron.
Por cierto y como anécdota curiosa, el Magistrado Galván -quien acaba de renunciar a la Presidencia del trife envuelto en un mar de dudas de corrupción-, entonces era secretario general, y ante una llamada que realicé para solicitar que los magistrados escucharan en audiencia pública a los científicos, me respondió que estaba consciente de la importancia de los estudios que entregamos pero que no podrían recibirnos porque ese era el acuerdo tomado.
Pregunto: si estaban conscientes de que se presentaron los dictámenes, ¿por qué no contestaron?
A mi profesor Rodrigo Saldaña, que acudió a un foro en la ibero de Puebla con el Dr. Víctor Romero y con el Ingeniero Javier Enríquez -autores de otros estudios presentados en tiempo y forma al trife-, le expreso una disculpa pública por no saberme expresar en ese foro y exponer todo lo que aquí escribo. Tal vez por mi falta no tomó en cuenta estos hechos para formular la opinión sobre la cual hoy disiento.
A ustedes que me hacen el favor de leerme les pido que consulten la página del Dr. Luis Mochán: http://em.fis.unam.mx/~mochan
René Sánchez Galindo