Seis Rasguños en la Diplomacia
Hola amigos:
Les envío un artículo que aparece en la revista eme equis, me parece interesante para que lo publiquen en su blog ¿que les parece?
Saludos
Carlos Santillan
Desde que asumió el cargo, Vicente Fox anunció un cambio radical en materia de política exterior. Con Jorge G. Castañeda al frente en un arranque y luego con Ernesto Derbez, indudablemente que cumplió con esa promesa. Sólo que los resultados de la misma dejaron más de un rasguño por aquí y por allá.El presidente y su comitiva suman más de cien viajes al extranjero. El álbum fotográfico de los viajes está lleno de pifias, ocurrencias y confrontaciones con diversos gobiernos, entre ellos los de Cuba, Venezuela, Argentina, Brasil y Bolivia. He aquí una revisión de los seis episodios más polémicos, analizados por el embajador Gustavo Iruegas, ex subsecretario para América Latina y el Caribe.
Por Humberto Padgett
El embajador Gustavo Iruegas, subsecretario para América Latina y el Caribe de la Secretaría de Relaciones Exteriores, tiene muy claro el diagnóstico sobre la diplomacia mexicana en estos años: “Fue una política que tenía la pretensión de continuar el modelo neoliberal y, además de ese defecto, se llevó a la práctica mediante una gestión mal hecha”. “México”, evalúa Iruegas, “no tenía necesidad de entrar en conflicto con esos países. En el trasfondo está cierto interés de agradar al gobierno de Estados Unidos. Fue una gestión mal hecha en la que en ocasiones hubo falta de oficio y de prudencia en otras”.
Episodio I.- “Cenas y te vas”
La oposición ideológica –interna y externa de Vicente Fox con los gobiernos de izquierda se resume en el desgaste al que fue sometida la relación con Cuba: “Acabó la relación con la Revolución Cubana e inician las relaciones con la República de Cuba”, cortó el secretario Jorge G. Castañeda el 3 de febrero de 2002. Fox, antes de abandonar la isla, se convirtió en el primer presidente mexicano en reunirse con la disidencia cubana. La crisis se profundizó meses después durante la Cumbre para el Financiamiento del Desarrollo en Monterrey, cuando Castro abandonó el encuentro internacional a petición del mandatario mexicano. El 19 de abril de ese año, y por primera vez en la historia, México otorgó su voto de condena a la situación de derechos humanos en el país caribeño. En respuesta, el líder cubano exhibió una grabación en la que el presidente mexicano le conminaba a abandonar el país para evitar su coincidencia con George W. Bush durante la Cumbre. “Comes y te vas”, le pidió Fox. México votó en dos ocasiones más por el apercibimiento mundial al Estado cubano por su conducción en el respeto a las garantías civiles. En 2004, la crisis llegó al borde del rompimiento de las relaciones diplomáticas con el mutuo retiro de las representaciones el 2 de mayo. Las relaciones se normalizaron el 25 de julio de ese mismo año. Gustavo Iruegas analiza: “La cuestión del ‘comes y te vas’ era un asunto en el que no se debió llegar a ese nivel. Se pudo intentar un mejor formato, porque una vez que el presidente invita a todos menos a uno, le resultaba muy incómodo. El presidente Bush estuvo 25 minutos, muy poco tiempo, se pudo maniobrar desde el punto de vista del programa, de la organización de protocolo que permitiría salvar la situación. Todo el asunto tuvo que ver con un temor exagerado”.
Episodio II.- “Ni siquiera los negros”
Tal vez ni siquiera hubo mala intención de por medio. Es más, pudo ser un enérgico reclamo a las políticas contra los emigrantes mexicanos adoptadas por Estados Unidos: “Los mexicanos y las mexicanas, llenos de dignidad, de voluntad y de capacidad de trabajo, están haciendo trabajos que ni siquiera los negros quieren hacer en Estados Unidos”, dijo el 13 de mayo de 2005 ante empresarios estadunidenses reunidos en Puerto Vallarta.Pero la frase, dicha en voz de un primer mandatario, tuvo efectos internacionales. El líder afroamericano Jesse Jackson reclamó una disculpa pública en medio de la tormenta que se abatió sobre Los Pinos, pero sólo logró que, en Nueva York, el mandatario mexicano lamentara “la mala interpretación” que se dio a sus palabras. Al poco tiempo, el Servicio Postal Mexicano emitió un timbre postal conmemorativo del cómic Memín Pinguín. Jackson brincó de nuevo, le reclamó a Fox disculparse y amenazó con convocar a la comunidad afroamericana a un boicot comercial contra productos mexicanos. Gustavo Iruegas: “Es una frase coloquial que sin duda mucha gente ha utilizado, pero que está muy fuera de lugar en un jefe de Estado, que además hubiera podido solventarse muy fácilmente, con una disculpa. Recuérdese que el presidente se negaba a emitir una disculpa a los negros que se sentían aludidos y, por otra parte, el presidente de México exigía una disculpa al de Venezuela. Pedir una disculpa no es algo que lesione, pero no darla y sí exigirla es una contradicción que deja mal a quien lo plantea”.
Episodio III.- “Que con su pan se lo coman”
Fox aspiraba a negociar con el nuevo gobierno boliviano la compra de gas natural y resolver así las quejas por el precio de los energéticos que lo enfrentaron con los industriales. Evo Morales advirtió que el gas boliviano es sólo para los bolivianos. Y Fox tronó. “Lo que no sabemos es qué postura va a tomar el nuevo gobierno que aparentemente había dicho que el gas de Bolivia no se exporta… pues ni hablar, lo van a consumir ahí o se lo van a comer ahí, pues allá ellos”, dijo. Morales le reclamó que no pretendiera “humillar a los bolivianos” y lo invitó a su toma de protesta como mandatario, donde podrían discutir “de frente”. Gustavo Iruegas: “Se trató de una reacción visceral de Fox, pero expresada en su calidad de jefe de Estado que no cuida sus palabras en público. Las relaciones diplomáticas no deben estar sometidas a la cuestión de la ideología. El conflicto de intereses se puede dar, pero de todas maneras la cortesía tiene que prevalecer”.
Episodio IV.- El tango ranchero
El desencuentro de Vicente Fox y Néstor Kirchner se suscitó en torno a la Cuarta Cumbre de las Américas, celebrada el 5 de noviembre de 2005 en Buenos Aires, en la que el presidente mexicano empujó por la reactivación y ampliación del Área de Libre Comercio para las Américas. Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, junto con Venezuela, rechazaron la propuesta. De regreso, Fox atribuyó a Kirchner el fracaso de la reunión, de no haber facilitado acuerdos y de actuar para complacer a la opinión pública de su país. Incluso, Fox le pidió al futbolista e ídolo, Diego Armando Maradona, que se dedicara al futbol y no a la política. Era demasiado para los argentinos. “No voy a ir a una cumbre a entregar los intereses de los argentinos por quedar bien con los invitados, por más grandes que sean”, contestó Kirchner el 7 de noviembre de 2005. “Que el presidente Fox se ocupe de México”. Gustavo Iruegas: “(La crisis) se da al mismo tiempo que el conflicto con Venezuela. La diferencia importante estuvo en que con Argentina se arregló como se debía: hablan los cancilleres y deciden dar por terminado el asunto y ya. El problema está en sus asesores, no sé si le dijeron y no hizo caso. Pudo, simplemente, tocar el tema en asuntos generales, y ahí no se lo hubieran impedido. Lo que le impidieron fue que interrumpiera un tema diferente para insertar uno que no querían tener en la reunión los otros presidentes. Y cuando todos son presidentes, nadie tiene trato diferencial. Fue una falta de manejo parlamentario”.
Episodio V.- “No se meta conmigo, caballero…”
Fue un pleito de dos presidentes reconocidos continentalmente –tal vez mundialmente– por sus patinadas verbales. Las diferencias entre los mandatarios también tocaron fondo en la Cuarta Cumbre de las Américas, en noviembre de 2005 por la pretensión de México de ampliar el Área de Libre Comercio para las Américas. Fox declaró que Chávez se concentró en complacer “a las cámaras” y no en lo que consideraba él éxito del encuentro sudamericano; le recriminó haberse dejado llevar por la “euforia” y la “parafernalia” para declarar muerto el ALCA, y que llegó “a extremos de inconsciencia”. Chávez recetó: Fox es “un cachorro del imperio”, “entreguista” y “usted da tristeza”. Relaciones Exteriores pidió explicaciones al embajador venezolano en México. “Ustedes empezaron”, replicó el diplomático venezolano, Vladimir Villegas, al canciller mexicano Luis Ernesto Derbez. México no aceptó las razones y aún más: le fijó plazo de 72 horas para hacerlo o, de lo contrario, habría de abandonar el país. “Presidente Fox, hay una copla en mi llano, usted que es hombre de caballo y de llano, que dice: ‘Yo soy como el espinito que en la sabana florea, le doy aroma al que pasa y espino al que me menea’. No se meta conmigo caballero, porque sale espinado”, amenazó Chávez el 13 de noviembre en su programa Aló presidente. Tlatelolco reclamó disculpas, pero Caracas invitó al gobierno mexicano a esperar sentado y así, ambos países retiran a sus embajadores y reducen la relación a encargados de negocios, situación en la que se encuentran hasta hoy. Gustavo Iruegas: “Fue una complicación deliberada, porque en vez de hablar los cancilleres y dar por terminado el asunto, como fue el caso de Argentina, en el de Venezuela fue llamar al embajador a pedir explicaciones, que éste no puede dar: ¿cómo diría que su presidente no tiene razón? ¿O que el presidente en donde está acreditado tampoco la tiene? Es una mala gestión, pero con intención”.
Episodio VI.- “Como a viles chinos”
La expresión “nos tomaron el pelo como viles chinos”, efectuada por el presidente Vicente Fox el 9 de marzo de este año ante inversionistas y trabajadores de la automotriz japonesa Honda. Gustavo Iruegas: “Es, nuevamente, una expresión coloquial impropia del presidente de la República, que lo pone en situaciones embarazosas”.
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