Calderón pacta con El Yunque
Álvaro delgado
México, D.F., 16 de octubre (apro).- Además del prominente tecnócrata que designó como coordinador de su equipo económico de transición y seguro secretario de Hacienda, Agustín Carstens, Felipe Calderón hizo hoy lunes otro nombramiento que es preciso observar: el de Juan Carlos Romero Hicks, hasta hace 20 días gobernador de Guanajuato. Si con Carstens se establece sin equívocos la línea neoliberal de la siguiente administración --una continuidad de los gobiernos de Miguel de la Madrid, Carlos Salinas, Ernesto Zedillo y Vicente Fox, tal y como lo han diseñado los organismos financieros internacionales--, Calderón deja ver también otra directriz con el nombramiento de Romero Hicks, coordinador de los foros “igualdad de oportunidades” del mentado proyecto “México 20-30”.Romero Hicks es un prominente militante de la secreta y ultraderechista Organización Nacional del Yunque, en la que tiene el seudónimo de “Agustín de Iturbide”, y heredó el cargo a otro integrante de esta mafia juramentada, Juan Manuel Oliva, quien llegó al gobierno mediante una alianza --¡vaya paradoja!-- con el magisterio transformado en partido que encabeza Elba Esther Gordillo.El dato es significativo no sólo porque acredita la colusión de Gordillo con el Partido Acción Nacional (PAN) controlado por El Yunque, que abomina el artículo tercero constitucional, ni tampoco --aunque es mucho-- porque Romero Hicks se perfila como secretario de Educación Pública en la administración de Calderón, cuya legitimidad está puesta en entredicho.Lo dato sustantivo es que Calderón parece haber ratificado el pacto con El Yunque, como lo hizo en su momento Carlos Castillo Peraza --a quien define como su mentor político--, y se dispone a integrar un gobierno que garantice, por una parte, los intereses de la coalición de intereses económicos que patrocinó su campaña y, por la otra, dé cabida al ejército de juramentados de esa organización extremista.Apenas la semana pasada, en este mismo espacio, informamos sobre la entrevista con Luis Paredes Moctezuma, expresidente municipal de Puebla capital y prominente militante de El Yunque durante más de tres décadas, quien afirmó que es “un asunto de seguridad nacional” la vigencia y nivel de penetración de esa organización secreta en todos los ámbitos de la vida de México.El expresidente del Frente Universitario Anticomunista (FUA), el primer organismo de fachada de El Yunque, advirtió también que Calderón debe abstenerse de pactar con la organización secreta que lo acecha y que ve al PAN y a sus gobiernos como una gran agencia de colocaciones.Pero poco tiempo pasó para que el propio Calderón proporcione una muestra de que reafirma el pacto que Castillo Peraza hizo en su momento y que él mismo hizo durante la campaña por la Presidencia de la República: el nombramiento de Romero Hicks es la más reciente prueba de ello, por si alguna duda había después de la designación de César Nava --también militante juramentado-- como su secretario particular. De manera que no hay sorpresas: si bien el nombramiento formal de Romero Hicks fue de Carlos Medina Plascencia, ese personaje que arrastra continuas derrotas y que ha sido reciclado como coordinador del proyecto “México 20-30”, Calderón lo convalidó para placearlo y nombrarlo secretario de Educación, una posición que El Yunque siempre exige para instrumentar el adoctrinamiento en las instituciones de educación públicas de todos los niveles, así como se ha venido haciendo en Guanajuato.Otros datos sobre Romero Hicks: tiene otros dos hermanos muy activos en política, obviamente también juramentados, uno de ellos, José Luis, es priista y fue director de Bancomext con Fox, y el otro, Eduardo, es alcalde de Guanajuato capital por el PAN. Para los priistas que lo dudan, pregúntenle al senador de su mismo partido por Guanajuato, Francisco Arroyo Vieyra. Los conoce bastante bien desde su niñez...ApuntesEn Tabasco ocurrió lo previsible: se impuso al candidato priista a gobernador, Andrés Granier, a punta de dinero, del erario de los tabasqueños, claro. Es también, por supuesto, un golpe contundente a Andrés Manuel López Obrador, que en las circunstancias poselectorales busca ser liquidado. Ganó el PRI, nomás eso faltaba. ¿Cómo? Como sea. Los tabasqueños “bien nacidos”, como se hacían llamar en el proceso de 1994 --cuando la elección costó el equivalente a 71 millones de dólares--, reprodujeron también la xenofobia, aderezada con la propaganda de los esquiroles panistas del “peligro para Tabasco” que representaba César Raúl Ojeda Zubieta. Claro, los hipócritas y los políticamente correctos aplauden. Se abre, así, más ancha la avenida para las tropas en Oaxaca… El presidente del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI), Alonso Lujambio --amigo y asesor confeso de Calderón--, decidió dar una muestra de su autonomía para garantizar el derecho de los mexicanos a saber en qué se gasta el gobierno federal el presupuesto público: decidió hacerle el trabajo sucio a quien le dio el empleo, el Ejecutivo, y ahora litigará contra el comisionado Alonso Aguilar Alvarez de Alba, militante panista formal, por cierto. En la sesión del miércoles 11 de octubre, Lujambio --el encubridor del financiamiento extranjero de los Amigos de Fox-- usará la infraestructura jurídica del IFAI contra el comisionado, de la que también depende… la misma estructura… Marta Sahagún está feliz, aunque sea transitoriamente: el juez 12 de lo civil del Distrito Federal, Carlos Miguel Jiménez, ratificó la sentencia –en primera instancia-- contra el semanario Proceso y la reportera argentina Olga Wornat por informar sobre un asunto que ella considera de su vida íntima. El fallo implica el pago a Sahagún de un millón 958 mil pesos y la publicación en la revista de un extracto de la sentencia, que será apelada, justo cuando el poder de esa mujer se viene abajo.... Comentarios: delgado@proceso.com.mx
México, D.F., 16 de octubre (apro).- Además del prominente tecnócrata que designó como coordinador de su equipo económico de transición y seguro secretario de Hacienda, Agustín Carstens, Felipe Calderón hizo hoy lunes otro nombramiento que es preciso observar: el de Juan Carlos Romero Hicks, hasta hace 20 días gobernador de Guanajuato. Si con Carstens se establece sin equívocos la línea neoliberal de la siguiente administración --una continuidad de los gobiernos de Miguel de la Madrid, Carlos Salinas, Ernesto Zedillo y Vicente Fox, tal y como lo han diseñado los organismos financieros internacionales--, Calderón deja ver también otra directriz con el nombramiento de Romero Hicks, coordinador de los foros “igualdad de oportunidades” del mentado proyecto “México 20-30”.Romero Hicks es un prominente militante de la secreta y ultraderechista Organización Nacional del Yunque, en la que tiene el seudónimo de “Agustín de Iturbide”, y heredó el cargo a otro integrante de esta mafia juramentada, Juan Manuel Oliva, quien llegó al gobierno mediante una alianza --¡vaya paradoja!-- con el magisterio transformado en partido que encabeza Elba Esther Gordillo.El dato es significativo no sólo porque acredita la colusión de Gordillo con el Partido Acción Nacional (PAN) controlado por El Yunque, que abomina el artículo tercero constitucional, ni tampoco --aunque es mucho-- porque Romero Hicks se perfila como secretario de Educación Pública en la administración de Calderón, cuya legitimidad está puesta en entredicho.Lo dato sustantivo es que Calderón parece haber ratificado el pacto con El Yunque, como lo hizo en su momento Carlos Castillo Peraza --a quien define como su mentor político--, y se dispone a integrar un gobierno que garantice, por una parte, los intereses de la coalición de intereses económicos que patrocinó su campaña y, por la otra, dé cabida al ejército de juramentados de esa organización extremista.Apenas la semana pasada, en este mismo espacio, informamos sobre la entrevista con Luis Paredes Moctezuma, expresidente municipal de Puebla capital y prominente militante de El Yunque durante más de tres décadas, quien afirmó que es “un asunto de seguridad nacional” la vigencia y nivel de penetración de esa organización secreta en todos los ámbitos de la vida de México.El expresidente del Frente Universitario Anticomunista (FUA), el primer organismo de fachada de El Yunque, advirtió también que Calderón debe abstenerse de pactar con la organización secreta que lo acecha y que ve al PAN y a sus gobiernos como una gran agencia de colocaciones.Pero poco tiempo pasó para que el propio Calderón proporcione una muestra de que reafirma el pacto que Castillo Peraza hizo en su momento y que él mismo hizo durante la campaña por la Presidencia de la República: el nombramiento de Romero Hicks es la más reciente prueba de ello, por si alguna duda había después de la designación de César Nava --también militante juramentado-- como su secretario particular. De manera que no hay sorpresas: si bien el nombramiento formal de Romero Hicks fue de Carlos Medina Plascencia, ese personaje que arrastra continuas derrotas y que ha sido reciclado como coordinador del proyecto “México 20-30”, Calderón lo convalidó para placearlo y nombrarlo secretario de Educación, una posición que El Yunque siempre exige para instrumentar el adoctrinamiento en las instituciones de educación públicas de todos los niveles, así como se ha venido haciendo en Guanajuato.Otros datos sobre Romero Hicks: tiene otros dos hermanos muy activos en política, obviamente también juramentados, uno de ellos, José Luis, es priista y fue director de Bancomext con Fox, y el otro, Eduardo, es alcalde de Guanajuato capital por el PAN. Para los priistas que lo dudan, pregúntenle al senador de su mismo partido por Guanajuato, Francisco Arroyo Vieyra. Los conoce bastante bien desde su niñez...ApuntesEn Tabasco ocurrió lo previsible: se impuso al candidato priista a gobernador, Andrés Granier, a punta de dinero, del erario de los tabasqueños, claro. Es también, por supuesto, un golpe contundente a Andrés Manuel López Obrador, que en las circunstancias poselectorales busca ser liquidado. Ganó el PRI, nomás eso faltaba. ¿Cómo? Como sea. Los tabasqueños “bien nacidos”, como se hacían llamar en el proceso de 1994 --cuando la elección costó el equivalente a 71 millones de dólares--, reprodujeron también la xenofobia, aderezada con la propaganda de los esquiroles panistas del “peligro para Tabasco” que representaba César Raúl Ojeda Zubieta. Claro, los hipócritas y los políticamente correctos aplauden. Se abre, así, más ancha la avenida para las tropas en Oaxaca… El presidente del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI), Alonso Lujambio --amigo y asesor confeso de Calderón--, decidió dar una muestra de su autonomía para garantizar el derecho de los mexicanos a saber en qué se gasta el gobierno federal el presupuesto público: decidió hacerle el trabajo sucio a quien le dio el empleo, el Ejecutivo, y ahora litigará contra el comisionado Alonso Aguilar Alvarez de Alba, militante panista formal, por cierto. En la sesión del miércoles 11 de octubre, Lujambio --el encubridor del financiamiento extranjero de los Amigos de Fox-- usará la infraestructura jurídica del IFAI contra el comisionado, de la que también depende… la misma estructura… Marta Sahagún está feliz, aunque sea transitoriamente: el juez 12 de lo civil del Distrito Federal, Carlos Miguel Jiménez, ratificó la sentencia –en primera instancia-- contra el semanario Proceso y la reportera argentina Olga Wornat por informar sobre un asunto que ella considera de su vida íntima. El fallo implica el pago a Sahagún de un millón 958 mil pesos y la publicación en la revista de un extracto de la sentencia, que será apelada, justo cuando el poder de esa mujer se viene abajo.... Comentarios: delgado@proceso.com.mx
