El espurio y Marin de nuevo juntos

Mario Marín asegura que Calderón volverá a Puebla para festejar el 5 de Mayo

Martín Hernández Alcántara

Por segunda ocasión en dos meses y medio, el presidente de la República Mexicana, Felipe Calderón Hinojosa, realizará una visita al estado de Puebla, pues será el invitado de honor al desfile del 5 de Mayo del gobernador estatal Mario Marín Torres, a quien el año pasado fustigó por su participación en al conjura contra la periodista Lydia Cacho Ribeiro, al punto de exigir que el Congreso local le aplicará un juicio político.

El anuncio sobre la estancia del panista fue hecho ayer por el mandatario estatal, durante la ceremonia en la que premió a los estudiantes que marcharon en la parada cívica de 2006 y entregó recursos para los que lo harán en la ocasión que se avecina.
En ese marco, Marín también dijo que invitó a los magnates Carlos Slim Helú y Carlos Peralta para que presencien el desfile.
De concretarse la visita de Calderón Hinojosa será la tercera en su mandato, la primera la efectuó el martes 9 de enero. Mario Marín lo acompañó a Hueytlalpan para iniciar las acciones de las llamadas “Caravanas para la salud”. La segunda ocurrió el viernes 23 del presente mes, cuando ambos inauguraron una planta de la cementera Cruz Azul, en Palmar de Bravo.

¿Amigos?

Confiado en la asistencia de sus invitados, Marín pronunció en su discurso de ayer:
“Exhorto a maestros y alumnos para que regresando de vacaciones intensifiquemos los preparativos para que el desfile del 5 de Mayo sea mejor que el año anterior que fue muy bueno. Debemos mejorar, sobre todo ahora que esperamos la visita de distinguidos invitados de todas partes del mundo y de México”.
El 17 de febrero de 2006, tres días después de que se hicieron públicas las conversaciones entre el titular del Poder Ejecutivo local y el apostador Kamel Nacif Borge –protector del pederasta confeso Jean Thouma Hannan Succar Kuri–, en la que ambos ultiman detalles sobre el encarcelamiento de la periodista Lydia Cacho Ribeiro, autora del libro Los demonios del Edén, Felipe Calderón Hinojosa, entonces candidato del Partido Acción Nacional a la presidencia, criticó con dureza a Mario Marín, durante un mitin celebrado en Cholula.
“No podemos acostumbrarnos a que en México ocurran estas cosas, no podemos dejar pasar un hecho de esta magnitud, ni podemos quedarnos callados como si nada hubiera pasado, porque quien se burla de los demás, quien se ríe del poder y lo usa contra quienes deben servir, hay que ponerle un alto, o la próxima víctima violada en una prisión puede ser cualquiera de nuestras hijas, hermanas o familiar”, aseveró en aquella ocasión.
Luego, acompañado de un grupo de panistas, Calderón se dirigió al Congreso local, que estaba cerrado, para exigir formalmente el inicio de un juicio político contra el llamado góber precioso. Una imagen quedó en la memoria de muchos mexicanos de aquella ocasión: el actual presidente, sacó una enorme tarjeta roja en un acto proselitista, dando a entender que Marín estaba expulsado, como en los partidos de futbol.
Calderón volvió a encontrarse con Marín en noviembre, durante una asamblea de la Conferencia Nacional de Gobernadores. La administración estatal se encargó de difundir entonces una fotografía en la que el mandatario estatal estrecha la mano del panista.