CUITLATLÁN

“Extravían” 3 mdp destinados al Panal

Fermín Alejandro García

En el Panal existe un malestar creciente porque se acerca el final de las campañas electorales y resulta que siempre fueron magros los apoyos económicos para los candidatos, principalmente de municipios y distritos rurales; pero además se ha regado el rumor de que se habrían “perdido” tres millones de pesos destinados para las actividades de los aspirantes a puestos de elección popular.

Lo irónico del caso es que mientras algunos candidatos no recibieron dinero ni para comprar cartulinas, el principal operador electoral de la sección 23 del SNTE y uno de los conductores de las estrategias electorales del Panal, Eric Lara Méndez, cobra más de 60 mil pesos mensuales, entre otros beneficios económicos.

Y lo más curioso del caso es que no hay dinero para las campañas del partido del SNTE, pero sí para la campaña de Eric Lara, quien ya anda haciendo amarres para intentar ser el próximo secretario general de la sección 23 de dicha organización gremial, luego de que se anunció que en enero de 2008 será el proceso de renovación de la dirigencia.

La historia de los 3 millones de pesos que supuestamente se “extraviaron”, es que hace tres o cuatro meses se supo que las dos secciones del SNTE, la 23 y 51, habrían recibido una partida de 7 millones de pesos que tendrían que ser transferidos al Panal para sus campañas electorales.

Nunca se supo de dónde venía ese dinero. Solamente se comentaba que era un secreto el origen del dinero.

Solamente se presumió que con ello el Panal haría una campaña lo suficientemente poderosa para ganar presencia en todo el estado desplazando en varias plazas al PRD, al PT e incluso al PRI.

El caso es que por órdenes directas de Elba Esther Gordillo Morales, la presidente del SNTE, se mandó a verificar no solamente la existencia del dinero sino que se estuviera aplicando los fondos. Los auditores únicamente pudieron detectar el destino final 4 de los 7 millones de pesos.

Eso –se rumora– enojó a Gordillo Morales. Por esa razón los representantes de las secciones 23 y 51 del SNTE habrían sido llamados a la ciudad de México, en donde los conminaron a que “aparecieran” esos tres millones de pesos.

Se dice que los dirigentes del magisterio argumentaron que se podía justificar el gasto en que se empleó el dinero.

Nadie sabe si la respuesta de los dirigentes magisteriales convenció a los altos mandos del SNTE y si ese dinero finalmente va ha aterrizar en las campañas del Panal.

Lo único cierto, es que los candidatos del Panal solamente reciben propaganda de su partido y no tienen otros recursos para hacer proselitismo.

Aún así, este partido ha resultado un dolor de cabeza para el PRI.

Se cierne escándalo sobre el PAN en Tehuacán

El candidato del PAN a edil de Tehuacán, Sergio Gómez Oliver, se ha convertido en un auténtico dolor de cabeza para muchos, incluido para su partido, pese a que lleva ventaja en las encuestas.

Dicen que ha asumido una actitud arrogante que incluso un día causó un enorme malestar en la ex directora nacional del DIF, Ana Teresa Aranda, quien había acudido a un acto de apoyo a su campaña.

Ayer, un nuevo hecho abonó la mala imagen de este candidato.

En una visita que realizó a Tehuacán el coordinador del voto del PRI, Javier López Zavala, no tuvo en empacho de acusar al abanderado panista de tener un fuerte problema de adicciones.

Se sabe que la primera reacción de algunos panistas fue la de amenazar con presentar una demanda penal contra López Zavala.

Luego se intentó frenar la declaración en las redacciones de varios medios de comunicación de Tehuacán.

Tal parece que el PRI busca irse a fondo en ese tema y está dispuesto a responder cualquier demanda judicial.

Este día habrá un debate entre los candidatos a la presidencia municipal. Será en el campus de la UAPEP y ahí, el tricolor exigirá un examen antidoping de todos los aspirantes a ediles.

Esa será la estrategia para intentar tumbar al PAN de las preferencias electorales.

¿Será?

Lo cierto es que el PRI no da por perdida la plaza en Tehuacán.