Rafael Hernández, chucho....... chin
■ Graco Ramírez, coordinador de la campaña de Ortega, acusa de parcialidad a Cota
Desestima Horacio Duarte la posible anulación de las elecciones del PRD
■ Critica Jesús Zambrano que Izquierda Unida no aceptara el recuento voto por voto en el DF
Ampliar la imagen Conferencia de prensa de Graco Ramírez y Rafael Hernández, del equipo de Jesús Ortega Foto: Víctor Camacho
A pesar de tensiones y descalificaciones entre los principales contendientes a la dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), por ahora no se vislumbra la posibilidad de anulación de las elecciones del pasado domingo, consideró Horacio Duarte, aspirante a la secretaría general del sol azteca por Nueva Izquierda. “Lo único claro que deja el proceso –dijo– es que la militancia percibe que ambas concepciones del perredismo se necesitan y deben coexistir” en función del resultado tan cerrado.
En contraste, el coordinador de la campaña de Jesús Ortega, el senador Graco Ramírez, arremetió en contra del presidente del partido, Leonel Cota, a quien acusó de actuar parcialmente y buscar la preservación mediante una imagen mediática de que el candidato de Izquierda Unida, Alejandro Encinas, ganó según los conteos rápidos. Pero esta postura no pudo ser sostenida a lo largo del conteo del Programa de Resultados Preliminares (Prep) y eso ha puesto en entredicho su papel como presidente, expresó.
El legislador criticó la decisión “ilegal” de ordenar la suspensión del flujo de información del Prep –el martes por la noche–, al momento en que había entrado la mayor parte de las cifras del Distrito Federal, pero estaban por ingresar los datos de entidades ganadas por Ortega. Rechazó que existiera la incorporación de casillas no instaladas en el programa que, por lo demás, solamente llegaron a 4 por ciento, lo que no incide en el resultado final.
Por otro lado, el candidato de Nueva Izquierda a la dirigencia capitalina, Jesús Zambrano, y el representante de esa corriente ante la Comisión Técnica Electoral (CTE), Rafael Hernández, cuestionaron la actitud de Izquierda Unida de rechazar el recuento voto por voto en el Distrito Federal, a pesar de que su candidato, Alejandro Encinas, habría avalado esta posibilidad. No obstante, dijo, hubo cerrazón absoluta a instrumentarlo en la capital.
Hernández explicó que Nueva Izquierda aceptó la víspera contar sufragio por sufragio en todas las entidades, sin embargo, con la postura asumida por Izquierda Unida en el Distrito Federal, “queda claro que su demanda del recuento era pura demagogia, sólo querían hacerlo en los estados donde perdieron, y si esto no es norma general no es posible aceptarlo”.
Señaló que la negativa de Izquierda Unida a abrir paquetes en la capital sólo evidenció una maniobra para buscar esa apertura en los estados ganados por Ortega, con el objetivo posterior de apelar ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para lograr la anulación, con el argumento de que se abrieron paquetes sin apegarse a las causales establecidas en el reglamento.
Para Izquierda Unida se sentó un precedente en la capital que deberá aplicarse de manera general en los cómputos de todo el país, que es reducir la posibilidad de recontar votos sólo en aquellos casos en los que el reglamento lo permita. Este reglamento señala que se abrirán cuando haya evidente error matemático, cuando no coincida el acta original con las copias de los representantes o no exista el acta.
Asimismo, Hernández denunció que simpatizantes de Encinas en Tamaulipas irrumpieron en las instalaciones de la CTE en Ciudad Victoria para destruir la paquetería electoral. Si bien no estuvo directamente gente cercana a él, realizó la destrucción en una entidad donde se tenía previsto el traslado del material a la capital para realizar el cómputo.
La intención de impedir la realización de los cómputos oficiales y la negativa al voto por voto, sólo evidencia “que asumen que no tienen ya ventaja en la elección, y por eso no quieren los cómputos”.
Por otra parte, criticó la pretensión de Dolores Padierna de querer trasladar por cuenta propia los paquetes electorales de Tabasco, pasando por encima de los funcionarios perredistas en la entidad.
A su vez, Horacio Duarte destacó que aun cuando la disputa por la presidencia del partido ha concentrado prácticamente todo el interés, Nueva Izquierda ha logrado una importante presencia a nivel de dirigencias estatales, donde estiman ganar 21, así como en la conformación del consejo nacional.
Desestimó por ahora que haya elementos para anular los comicios, pues existe disposición de ambas partes a tratar de “cuidar la elección”. No obstante, reconoció que para cualquier fuerza política una diferencia inferior a uno por ciento genera tentación de buscar revertirla apelando a los tribunales, si bien precisó que Nueva Izquierda mantiene su postura de no impugnar la elección.