De lo contrario no saldría de los pinos
Rechaza el procurador Medina Mora que pudiera instaurarse el estado de excepción
Revira Calderón al Congreso: no cesarán operativos militares
''Haremos todo, aunque algunos insistan en eliminar y restringir la acción del gobierno'', dice
Gómez Palacio, Dgo., 24 de mayo. Este gobierno no dará ni un paso atrás en la lucha contra la delincuencia organizada, ni en la aplicación de operativos, advirtió el presidente Felipe Calderón unas horas después de que el Congreso le pidiera evitar el despliegue del Ejército Mexicano en el combate al narcotráfico.
Pidió a los mexicanos, en particular a los de la región de La Laguna, que manifiesten a los legisladores del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y a algunos del Revolucionario Institucional (PRI) -bancadas que impulsaron el exhorto del miércoles pasado- la situación que viven a causa de los secuestros y de la violencia.
Aseguró: ''Haremos todo, aunque algunos insistan en eliminar y restringir la acción del gobierno federal''.
La respuesta de Calderón se dio luego de que el gobernador de Durango, el priísta Ismael Hernández Deras -también aliado de la lideresa magisterial, Elba Esther Gordillo-, apoyó la participación del Ejército en estas tareas.
''Están arriesgando su vida''
Además, lo llamó a continuar por este camino: ''Adelante, Presidente, que no le tiemble la mano; nosotros lo apoyamos''.
Si bien el mandatario federal no habló directamente del Ejército en su discurso, sí se lo planteó a Enrique Benítez Ojeda, vocero del PRI en la Cámara de Diputados, con quien conversó durante la gira. Al respecto, Benítez comentó: ''El Presidente con justicia decía: el Ejército está haciendo su mejor esfuerzo, los soldados están arriesgando su vida, hemos hecho mucho para que el Ejército nos quiera ayudar y nos esté ayudando como para que la (Comisión) Permanente nos haga este exhorto''.
Por ello, el legislador dijo que ayer mismo se comunicó con Emilio Gamboa Patrón, líder de la fracción parlamentaria del tricolor en San Lázaro, para pedirle que se discuta de nuevo el tema en ese órgano parlamentario, aunque reconoció que el exhorto no se podía modificar.
La inauguración de la planta de tratamiento de aguas residuales Oriente, en la región lagunera -donde recientemente se han dado varios secuestros y hechos de violencia, como el reciente ataque contra Carlos Herrera Araluce, dos veces alcalde de Gómez Palacio y propietario de Lácteos Chilchota-, fue propicia para que Calderón expresara su solidaridad a los habitantes de este lugar y aprovechara para defender sus operativos de seguridad.
Planteó que no es la solución acobardarse, esconderse o cruzarse de brazos como si esa realidad no existiera. Al hacer referencia a los hechos de violencia ocurridos en esta zona, aclaró que no se deben a la actuación del gobierno federal, porque no ha habido presencia de un operativo aquí.
La causa, explicó, se encuentra en una ''nueva lógica criminal'' de bandas que llegan a una región y se encuentran con que no hay autoridad, no hay gobernador, no hay Presidente, y dicen la autoridad soy yo.
Justificó así que los operativos encabezados por el gobierno federal tengan el propósito de rescatar ciudades, pueblos que han sido copados por el crimen organizado.
Al final agradeció enormemente a su ''amigo'' -como llamó a Hernández Deras- su valiente posición y apoyo. Minutos antes, el mandatario estatal defendió con todo los operativos del gobierno federal y expresó su desacuerdo con ''presiones políticas'', concretamente las del Congreso de la Unión, que buscan frenar la participación de las fuerzas armadas en el combate contra el crimen organizado.
Frente a un grupo de diputados y senadores que fueron invitados a la gira, hizo un llamado a que se revise el punto de acuerdo del día anterior y se considere que el pueblo y los gobiernos locales sí requieren la participación de los militares en esta lucha. Y pidió a Calderón que en su calidad de comandante supremo de las fuerzas armadas acepte ampliar la presencia de las fuerzas federales en la entidad.
El gobernador duranguense, cercano a Gordillo, no perdió la oportunidad para reiterar su respaldo al michoacano para que pueda emprender las reformas estructurales en los sectores energético, laboral y fiscal.
De manera adicional, el legislador Benítez Ojeda señaló en entrevista que hay muchas voces de gobernadores y de diputados que apoyan el despliegue de los militares. ''Hay que cuidar mucho al Ejército. Lo más grave sería decirle que no estamos de acuerdo, cuando está jugándose la vida''.
Sobre su charla con Gamboa, señaló que éste ofreció platicar el asunto con el Presidente, así como con legisladores en la Comisión Permanente, y dijo inclusive que desconocía los motivos que originaron el voto de algunos priístas.
La primera escala de Calderón fue en el municipio de San Juan Guadalupe, cuyos habitantes estaban de plácemes por la inauguración de la primera etapa de
la presa El Tigre, en esta zona pobre y semidesértica. Ahí, el titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), José Luis Luege Tamargo, se equivocó varias veces y llamó al municipio San José de Guadalupe, lo que motivó regaños de todos. Para empezar de los pobladores, quienes gritaron ''¡fuera, fuera!''
Cuando Luege cometió el primer error, Calderón se cruzó de brazos y se rió, pero después colocó el pulgar hacia abajo, en señal de reprobación. Finalmente, el funcionario pudo concluir su discurso, no sin antes ofrecer una disculpa argumentando que visita muchos lugares y se confunde, pero Calderón -sin dejar de sonreír- en vez de felicitarlo hizo un gesto como de que iba a darle un golpecito con la mano.
Pero también el gobernador intervino y llamó al panista ''Juan Luis Luege'', y pidió recursos extraordinarios con cargo a la Conagua para resarcir el error, a lo que el Presidente respondió que sí, pero expresó su temor de que el dinero se entregara a San José de Guadalupe, ''como dice aquí el ingeniero''.