lunes, julio 16, 2007

René Sánchez Galindo

Sangriento, el actual régimen
René Sánchez Galindo
16 de julio de 2007

Existe una denuncia contra la privatización de la Guelaguetza desde el año pasado. Se acusa al gobierno de Ulises Ruíz Ortiz, URO, de privilegiar los intereses de un pequeño grupo de empresarios, por encima de las organizaciones indígenas que son las auténticas poseedoras de esta tradicional fiesta. No hay respuesta de nadie, no hay solución a este conflicto.

Existe una denuncia contra el desvío de recursos federales para la pobreza en contra de URO. No hay respuesta de nadie, no hay solución a este conflicto. Existe denuncia contra la pésima administración tanto federal como local de el servicio público de educación pública. No hay respuesta de nadie, no hay solución a este conflicto.

Existe una denuncia contra la represión de los gobiernos federal y estatal por violaciones graves a los derechos humanos: desaparecides, asesinados, detenciones ilegales, presos políticos, uso indebido de armas contra la población prohibidas por la ONU. No hay respuesta de nadie, no hay solución a este conflicto.

Lo que sí existe es que los representantes del movimiento social conocido como APPO han sido brutalmente reprimidos. Siguen en la cárcel algunos de sus líderes como Flavio Sosa. No obstante que de un solo golpe la justicia federal otorgó amparo a cerca de 100 personas detenidas, otros más siguen presos. Imagínense ustedes que (el ejército disfrazado de) la policía llega a un lugar público y detiene con lujo de violencia a más de 200 personas, pero después de varios meses en un solo acto reconocen que con cerca de la mitad se equivocaron y con la otra mitad han ido poco a poco reconociendo que son inocentes.

Esta situación ha sido consignada por organismos internacionales civiles como Amnistía Internacional, la Comisión Civil Internacional para la Observación de los Derechos Humanos y nacionales como la Limeddh o el Centro Pro de Derechos Humanos. Vaya, hasta la Comisión Nacional de Derechos Humanos, aunque tibiamente, lo ha reconocido.

El gobierno estatal solo ha respondido con la represión. El Senado afirmó contradictoriamente que existía ingobernabilidad, que los poderes estatales no podían gobernar pero que sí existían. ¿Qué es eso? El gobierno federal a cargo de Fox mandó militares en funciones de Policía Federal Preventiva, PFP. Y el actual régimen encarceló a los líderes. Entre ellos David Venegas, concejal de la APPO y estudiante de Champingo. Pero no sólo eso, sino que cuando David Venegas ganó su amparo, el actual régimen ordenó que el Ministerio Público federal interpusiera un recurso de revisión para impedir que saliera libre.

Por su parte la Suprema Corte a más de un año se le ocurre iniciar una investigación para revisar la violación grave de derechos humanos. La esperanza de algunas personas de la APPO está en la Corte; sin embargo si analizamos el tratamiento que le ha dado al caso de Mario Marín, la pederastia y la violación de derechos humanos a la periodista Lydia Cacho, pues la esperanza se reduce.

Ayer la APPO pretendió presentar su propia Guelaguetza magisterial – popular y lo que recibió fue más represión. Contestaron ciertamente, pero ante la falta de soluciones cuál debe ser la vía.

Qué vía deben seguir los ciudadanes de Oaxaca, qué opciones tienen, un gobierno local represor, un legislativo federal contradictorio, una Suprema Corte que retarda y administra políticamente los conflictos y el actual régimen que de unas manos propagandísticamente limpias, ahora están manchadas de sangre.

Cuál es la vía. Es pregunta.

René Sánchez Galindo
ranazapatera@gmail.com

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