miércoles, abril 02, 2008

“Memorias de una infamia” en Puebla.

René Sánchez Galindo
1 de abril de 2008

Random House Modadori, la empresa internacional que entre otras casas editoriales es dueña del sello Grijalbo, publica el libro “Memorias de una Infamia” que será presentado este sábado 5 de abril en el Zócalo de la Capital Poblana.

Se trata de un libro que los y las poblanas deben leer, deben tener en su librero y deben reflexionar. No hay por qué temerle, la Suprema Corte de la Nación ya resolvió que no hubo violación grave a los derechos humanos de la autora de este libro, la periodista y defensora de los derechos humanos de las mujeres, niñas y niños, Lydia Cacho.

Nadie en Puebla debe asustarse, ni siquiera las 40 personas mencionadas al final del libro como copartícipes de los sucesos por todos conocidos. La resolución de la Corte se emitió en diciembre de 2007 y el libro terminó de editarse e imprimirse un mes antes. Es decir no tienen por qué temer.

Pero es un libro que debe ser leído por toda la comunidad poblana. Es el relato que nos faltaba, dice Carmen Aristeguí en el Prólogo del Libro. En esta obra Lydia Cacho sintetiza algunas de las denuncias de pederastia, nos cuenta algunos episodios de su vida, nos relata con detalle cada momento de la detención ilegal por todes conocida, y ya estudiada por la Corte, y se atreve a exponernos sus momentos de angustia, temor y esperanza.

Esperanza, a pesar de lo acontecido, a pesar de las resoluciones, a pesar de las presiones. Desde la introducción del Libro, la autora nos alerta de la profundidad del mismo: “Aunque no podía anticipar todas las implicaciones intuía que la única manera de proteger lo que quedaba de estas niñas y niños con una vida truncada era llevar ante los tribunales y eventualmente a la cárcel a los culpables”.

Le pido que relea estas palabras y que dimensione el significado de cada una de ellas. De ese tamaño es el libro “Memorias de una Infamia”.

Insisto, con todo y ello no deben temerle quienes ahí son denunciados porque finalmente, la Corte ya falló. No considero que este deba ser el tema para que aquellos medios de comunicación que han hecho un gran esfuerzo por la pluralidad, la libertad de expresión y nos han respetado en todos los temas desistan de este esfuerzo.

En ese sentido, respetuosamente y firmemente les pido y les exijo que dejen hacer nuestro su trabajo, que dejen ejercer nuestra libertad de expresión, que dejen actuar a las organizaciones civiles, a las y los ciudadanos que estamos preocupados por un mejor México.

La historia llama. Es preciso comunicar y difundir ampliamente que Lydia Cacho y Carmen Aristegui estarán este sábado 5 de abril en el zócalo de la Ciudad de Puebla a las 12:00 hrs. para presentar el libro “Memorias de una Infamia”.

Los medios de comunicación en Puebla tienen la palabra.

ranazapatera@gmail.com

El Universal

Cacho denuncia boicot de ‘Góber’

Amenazan a funcionarios para no ir a presentación de libro, dice



Alberto Morales y Yanet Aguilar
El Universal
Miércoles 02 de abril de 2008

alberto.morales@eluniversal.com.mx

yanet.aguilar@eluniversal.com.mx

La escritora y periodista Lydia Cacho denunció que en Puebla hay una campaña para boicotear la presentación de su libro Memorias de una infamia a celebrarse el próximo 5 de abril en el Zócalo de esa ciudad.

Responsabilizó al gobierno de esa entidad, que encabeza Mario Marín, de lanzar una estrategia de intimidación entre los empleados del gobierno estatal y estudiantes becados de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), para no asistir bajo la amenaza de perder su trabajo y retirarles sus becas económicas.

La también autora de Los demonios en el Edén, donde documenta una red de pederastia en México que implica a políticos y empresarios; y por el cual fue detenida por el gobierno de Marín Torres a petición del empresario textil Kamel Nacif, según grabaciones telefónicas dadas a conocer en 2006.

Dijo que en marzo la editorial (Grijalbo Mondadori) contrató a una empresa para colocar un anuncio espectacular, en el que se invitaba a la gente a la presentación del libro, pero el domingo pasado por la noche la policía llegó a retirar con el argumento que era “peligroso”.

Retiran anuncio

Norma Bautista, gerente de comunicación del grupo editorial Random House Mondadori, confirmó que el 14 de marzo se montó el espectacular en la calle 11 Sur del centro de Puebla. “La agencia de Puebla dijo que el espectacular fue retirado por una orden que decía que la estructura no cumplía con los requerimientos de seguridad y que las construcciones aledañas estaban en peligro”, señaló Bautista.

Hasta ayer por la tarde, la agencia de publicidad había pagado la multa y se comprometió a reinstalarlo en el mismo lugar para cumplir los 35 días como marca el contrato; sin embargo, ya se había instalado otro anuncio panorámico.

Además del retiro del anuncio espectacular, todos los medios de comunicación —radio y prensa escrita— que tenían pactadas entrevistas con la periodista Lydia Cacho para hablar de su libro, fueron canceladas sin razón alguna.

“Tenemos informes de que el gobierno poblano envió una carta a todos los directores de todos medios para que no cubran el acto, que es caso superado y que están haciéndole daño al gobierno y a la sociedad al darme espacio”, acusó Lydia Cacho.

La también defensora de derechos humanos dijo que en las secretarías del estado de Puebla se advirtió a sus trabajadores que no podían ir a la presentación.

“La advertencia dice que la Secretaría de Gobierno va a poner cámaras de video y sí se encuentra que algún empleado asistió perderá su trabajo. De esto ya hay antecedentes, que documento en mi libro, de cómo personas que ayudaron a mi liberación fueron despedidas”, subrayó la escritora.

La periodista dijo que acudió ya a instancias como el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ), con sede en Nueva York, y a Reporteros Sin Fronteras para denunciar estos hechos.

Afirmó que no tiene temor y que se llevará a cabo la presentación de su libro en Puebla, porque la sociedad tiene derecho a enterarse de la otra parte de la historia la que llamó “la historia de los perdedores, la de quienes no tuvo acceso a la justicia y el gobernador no puede evitarlo”.

Se buscó en reiteradas ocasiones la respuesta del gobierno poblano, pero el director de Comunicación Social, Javier Sánchez, no respondió al llamado.

Columnistas

Tiempos de Nigromante
de Arturo Rueda

artrueda@laquintacolumna.com.mx



Regresa Lydia Cacho

La periodista Lydia Cacho regresa a Puebla el sábado. No lo hará de la misma forma en que llegó hoy a la entidad por primera vez, aquél sábado 15 de enero del 2005, después de una odisea de 20 horas de viaje en carretera desde Cancún, custodiada por dos policías judiciales que ejercieron sobre ella tortura psicológica y escoltada por un comando del empresario Kamel Nacif. Ahora vuelve a Puebla para presentar su libro Memorias de una infamia en compañía de las periodistas Carmen Aristegui y Sanjuana Martínez, el joven jurista Lorenzo Córdova Vianello y la académica María Eugenia Sánchez Díaz de Rivera. Lo hace, además, cuatro meses después del carpetazo que seis ministros de la Suprema Corte de Justicia ejecutaron para declarar la inocencia del gobernador poblano.

Pocas cosas se han sabido de Lydia Cacho desde entonces y muchas preguntas se quedaron en el tintero. ¿Por qué no acudió a la sesión definitiva del 29 de noviembre de año pasado, cuando los ministros exoneraron al gobernador? ¿Acaso sabía ella cuál sería el fallo final y ya no quiso enfrentar a los medios? ¿Por qué tampoco acudieron sus abogados del despacho Olea? ¿Es cierto que incurrieron en prevaricato y por ello ya no fueron contratados para enviar el caso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos? ¿Por qué Cacho no denunció la actitud sospechosa de la ministro Olga Sánchez Cordero y su cambió de voto? ¿Y por qué tampoco denunció la colusión PRI-gobierno federal por intermediación de Manlio Fabio Beltrones?

Aunque el escándalo hace meses que terminó, al gobierno estatal todavía le escuece la presencia de la periodista y por eso, dicen, busca minimizar la presentación de su libro en el zócalo capitalino. Y es que, para honra de unos y vergüenza de otros, el nombre de Lydia Cacho es una herida abierta entre los poblanos. Un espejo cruel que devuelve un reflejo nítido de las culpas y virtudes que tuvo cada uno de los hombres y mujeres que a lo largo de dos años incidieron en denunciar las violaciones a los derechos humanos o en excusar y defender al gobierno. La gravedad del escándalo obligó a que cada uno tomara una definición: cómplices o acusadores. No hubo otro papel. Más los primeros, casi inexistentes los segundos.

El reflejo que el espejo llamado Lydia Cacho le ofrece al marinismo es de temor. El escándalo hizo del gobernador poblano un personaje del folklore nacional, ejemplo vivo de impunidad, enemigo a muerte de los intelectuales y periodistas de la Ciudad de México, y sepultó sus sueños guajiros de llegar algún día a la Presidencia de la República. Internamente, partió su sexenio en dos y lo divorció de la sociedad poblana que un día lo encumbró como un político de corte popular. Lo dejó, además, a merced de las negociaciones con el gobierno panista, a quien entregó dos senadurías y doce diputaciones federales a cambio de su exoneración. En resumen: un régimen que en pleno vuelo le cortaron las alas y se abatió estrepitosamente sobre el suelo por culpa de la periodista. O por lo menos así lo creen.

El reflejo que le da a la mayoría de los medios de comunicación poblanos es el de la vergüenza de haberse convertido en cómplices del silencio y copartícipes de la operación gubernamental para sepultar el escándalo y desactivar la ira ciudadana que un día sacó a más de 30 mil poblanos a la calle para protestar. Vendieron su conciencia por un plato de lentejas. O por varios. Periódicos y noticieros resintieron en sus audiencias la pérdida de credibilidad, pero los bolsillos crecieron notablemente. Pocos, muy pocos, nos atrevimos a mantener una opinión crítica y pagamos el costo. Todavía se mantiene latente el agravio de la censura a La Quintacolumna radio.

La fuerza del espejo alcanza para pegarle también a la oposición al PRI que no pudo capitalizar electoralmente la crisis del régimen en las elecciones intermedias del año pasado. El PAN, vergonzosamente, generó una complicidad con el marinismo de la que después ya no supo soltarse. En lugar de utilizar el escándalo como bandera de campaña, recurrieron a él cuando ya se habían hundido en las encuestas. El PRD permaneció impasible, y algunos de sus miembros que se agruparon en el Frente Cívico se corrompieron después de algunas semanas de lucha.

Al gobierno estatal, le irrita que además de Lydia Cacho, a la presentación de Memorias de una infamia venga Carmen Aristegui, quien desde W Radio lanzó la bomba de las conversaciones junto con La Jornada y siempre mantuvo vigente el caso desde su espacio. Veladamente, la periodista ha señalado a Mario Marín como uno de los responsables en su salida de W Radio. Sanjuana Martínez también ha sido un dolor de cabeza al tratar el caso del cura pederasta, Nicolás Aguilar, a quien la justicia poblana dejó libre para que pudiera abusar de muchos niños más.

No sé cuántos poblanos pueda reunir Lydia Cacho el próximo sábado en la explanada del zócalo capitalino. Lo que sí sé es que estarán ahí los que le apuestan a la memoria y la dignidad como forma de vida. En puntos de las doce del día ahí nos vemos.

*** El régimen de la reconciliación. Prometedora la investidura de Luis Ernesto Derbez como Rector de la Universidad de las Américas. Un nuevo ambiente se respira en el campus cholulteca: el de una reconciliación entre el Patronato encabezado por la familia Jenkins, el personal académico y sobretodo, los estudiantes. El ex canciller tomó las cosas con calma; en el lapso de un mes se reunió con los grupos disidentes, dialogó con los alumnos y reunió al profesorado, prometiendo el fin de la represión. Con sencillas medidas, la crispación descendió hasta permitir una pacífica investidura.

Es subrayable la posición autocrítica que contuvieron los discursos de Guillermo Jenkins, el nuevo rector, y fundamentalmente de la Decano de la Escuela de Ciencias Sociales, María Luisa Vilar: la UDLA vivió una etapa horrible, tocó fondo y sólo el trabajo conjunto permitirá salir adelante. La agenda de Derbez, igualmente, parece sensata: hay que atender lo urgente y al mismo tiempo desarrollar un proyecto de cinco años. Entre lo urgente, lo más es responder a las observaciones de la SACS, para lo cual empezarán a funcionar tres comités: uno de empresarios, otro académico y uno más de administración.

Vientos prometedores soplan en la quinta universidad más importante del país.

*** Digno sucesor. La partida de Fernández Font dejó un hueco en la vida intelectual y ética de Puebla, pero parece que tendrá un digno sucesor al frente de la Universidad Iberoamericana. Se trata del prestigiadísimo académico Juan Luis Hernández, quien cursó su doctorado en la Universidad Autónoma de Madrid al lado de uno de los expertos electorales más importantes del mundo, José Ramón Montero.

Enhorabuena, porque se trata de alguien con preparación más que sólida.

*** La vida es una to-to-tómbola. Carlos Ramírez, periodista metido a mercenario, vino a Puebla para hacer el negocio de su vida: venderle al gobierno marinista un diario que ayudara a legitimarlo y, al mismo tiempo, le hiciera la vida imposible a sus enemigos. Todo se cristalizó en el bodrio llamado Transición Puebla. No hizo ni lo uno ni lo otro.

La vida pone a cada quien en su lugar. Que Transición descanse en paz ahora que ha dejado de circular.

Noticia muy principal .....no que no

Ubican ‘tesoro’ a baja profundidad

Estudio: para explorar el Golfo no hacen falta alianzas


Un estudio en poder de legisladores revela el potencial que tiene México para incrementar las reservas de petróleo y gas, en el corto plazo y con una inversión relativamente baja, si explota yacimientos en aguas someras (de poca profundidad).

El documento al cual tuvo acceso EL UNIVERSAL, considera innecesarias las asociaciones que ha planteado Pemex con compañías extranjeras con el fin de explotar yacimientos en aguas profundas del Golfo de México.

Asimismo, el trabajo elaborado por Ingenieros Petroleros y Geofísicos Asociados (IPYGA) refiere que zonas frente al litoral de Campeche podrían producir hasta un millón de barriles diarios de petróleo, que representan una tercera parte de la producción actual.

Según estimaciones, esa región requeriría 2 mil 400 millones de dólares para el desarrollo de 200 pozos y 2 mil millones más en infraestructura.

El reporte destaca que para incrementar a corto plazo las reservas petroleras y de gas Pemex deberá acelerar el desarrollo de campos descubiertos en la sonda de Campeche, en el litoral marino de Tabasco, así como en los campos de la plataforma continental de Veracruz.

Respecto al plan de la para-estatal para aliarse con compañías extranjeras, con el fin de explotar yacimientos en aguas profundas, establece: “La tecnología y los equipos especializados están disponibles en el mercado de proveedores y contratistas y la paraestatal los puede adquirir con sus recursos”, sin que implique compartir las reservas de hidrocarburos.

Por último, el informe destaca la situación del yacimiento Sihil, descubierto en 1999 y que a la fecha no ha sido desarrollado. Sus reservas, señala, ascienden a mil 140 millones de barriles.

Sale sta foto de los poblanos de nuevo

Bajo la Lupa

Alfredo Jalife-Rahme

■ Las petroleras trasnacionales privadas, ¿en liquidación?

Ampliar la imagen En imagen de archivo, movilización en el Zócalo capitalino contra la venta de Petróleos Mexicanos En imagen de archivo, movilización en el Zócalo capitalino contra la venta de Petróleos Mexicanos Foto: José Carlo González

En medio de los funerales oficiales del desregulado neoliberalismo global (ver Bajo la Lupa, 30/3/08), que simulan ignorar el calderonismo, sus colaboracionistas del PRI y los desviacionistas del PRD, se pretende regalar el “tesoro” de los hidrocarburos en las aguas profundas del golfo de México –en el peor momento coyuntural, cuando el barril del crudo rebasó el umbral sicológico de los dos dígitos– a empresas trasnacionales privadas en vías de “liquidación” (¡súper sic!), como nos ilustra Matthew Simmons, exitoso banquero de inversiones texano, íntimo de la dupla Bush-Cheney y uno de los principales conocedores del mercado petrolero global.

Cuando el texano Simmons habla de hidrocarburos equivale a George Soros en el mundo financiero: “los ejecutivos de las trasnacionales petroleras hoy pasan por alto que se encuentran en vías de liquidación (…) No importa cuánto dinero se dispongan a gastar, pues no pueden enfrentar sus curvas de declinación cuando sus reservas probadas se han reducido velozmente” (WorldNetDaily, 39/3/08).

Ni más ni menos que nuestra tesis sobre la desprivatización petrolera global y su dinámica renacionalizadora, que favorece a las empresas estatales que concentran más de 90 por ciento de las reservas mundiales frente a menos del exiguo 10 por ciento todavía en manos de las trasnacionales petroleras privadas (Ver: suplemento especial sobre el petróleo, La Jornada, 18/3/08). No es cuestión ideológica, sino contundentes cifras estructurales que marcan nuestro zeitgeist, el “espíritu de los tiempos”.

Pues pese a todas las advertencias, cuando los hidrocarburos se han manifestado como la principal carta geoestratégica planetaria, al riesgo de poner en peligro la seguridad nacional, el calderonismo se empecina en regalar Petróleos Mexicanos (Pemex) a sus aliadas trasnacionales privadas: texanas y gallegas. Como se da a entender, Calderón resulta el “hombre de Repsol YPF” (por cierto, pirata trasnacional española, expulsada de Sudamérica y en quiebra técnica en Argentina), Reyes Heroles Jr. el hombre de las trasnacionales texanas en el interludio de su aciago paso entre la Secretaría de Energía y su ascenso a Pemex, el secretario de Comunicaciones Téllez Kuenzler el representante simultáneo del quebrado Grupo Carlyle y Georgina Kessel, la supuesta secretaria de Energía (que sabe de petróleo lo que yo de sánscrito), resulta una lastimosa empleada de los parasitarios consejos Coordinador Empresarial y de Hombres de “Negocios” de “México”, que preside el bushiano-salinista Claudio X. González. Entonces, ¿quién representa los intereses del verdadero México?

El calderonismo sufre el “síndrome Banamex/Citigroup”, que forma parte de una enfermedad incurable de los neoliberales “mexicanos” que padecieron en su momento De la Madrid, Salinas, Zedillo y Fox, que consiste en entregar la riqueza nacional a la plutocracia local y foránea.

Tal parece, si nadie lo detiene, que el calderonismo está dispuesto a repetir la misma fórmula con Pemex, para que sea rematada a las trasnacionales petroleras privadas en vías de liquidación.

En una entrevista en el programa Squawk Box, de CNBC, Simmons, fiel a su estilo texano, no se anduvo con rodeos y abundó sobre la “lúgubre realidad” de la industria petrolera privada. El banquero inversionista texano es un connotado proponente de la “teoría del pico” del petróleo: después de haber alcanzado su acmé ha empezado a declinar.

Naturalmente que los afectados, es decir, las otrora gigantes petroleras anglosajonas (hoy enanas frente a Gazprom, de Rusia, y Aramco, de Arabia Saudita), persisten en engañar, cual su costumbre recidivista, y no solamente inflan sus cifras de reservas –que a su vez abultan su cotización bursátil artificial (los casos de las mendaces Shell y Repsol son flagrantes)–, sino, peor aún, rechazan la validez de la “teoría del pico” con tal de prolongar su agonía en los cuidados intensivos.

No faltan cándidos que tildan la “teoría del pico” –a la que Bajo la Lupa se adhirió sin tapujos en marzo de 1998, después de haber sido convencido por los sólidos argumentos de Larrehère y Campbell en The Scientific American– de neomalthusianismo trasnochado, como si los hidrocarburos fuesen infinitos.

Así, John Hofmeister, presidente de operaciones de Shell Oil en Estados Umidos, con sede en Houston, también apareció en CNBC para alegar que la tesis de Simmons “había inundado al mundo” y que “sus hipótesis eran muy estrechas”, ya que no consideraba el petróleo “no convencional”, como el bituminoso (tar sand) de Alberta, Canadá.

Hacen trampa quienes recurren al petróleo “no convencional” –el bituminoso de Canadá y el “tesoro” calderonista en las profundidades del golfo de México, para situarnos en la esfera de influencia del ASPAN que controla Estados Unidos –ya que el enfoque de la “teoría del pico” es al petróleo netamente convencional, que se está agotando de la confesión de los propios productores (v. gr., el yacimiento Cantarell, campechano con hipoteca gallega. Además, la culpa del agotamiento (depleción) se debe en gran medida al consumismo depredador estadunidense, que despilfarra más de la cuarta parte global sin el menor miramiento a la naturaleza.

Luego de enfatizar que el precio del petróleo era “muy barato”, 100 dólares el barril, Simmons desmonta la “solución” de los recursos “no convencionales” y coloca en su justa dimensión la aventura exploratoria de Shell en Alberta, que después de “varios (sic) años” no ha sido muy exitosa. Al contrario, ha salido exageradamente costosa, lo que puede orillar a la trasnacional británica a tirar la toalla. Desmitifica el petróleo a bituminoso canadiense, cuya extracción equivale a “transformar el oro en plomo”: el bituminoso es de muy baja calidad y necesita ser optimizado con petróleo de alta calidad para crear el crudo”, además de requerir “una increíble cantidad de agua potable (¡súper sic!)” y consumir bastante gas natural como fuente de energía para el proceso. ¿Dónde quedó la preservación de la armonía biosférica?

Como reza el adagio popular libanés: ¡para prender un cigarro, las trasnacionales anglosajonas y gallegas incendian el planeta!

Julio Glockner

Amigos y amigas:
El gobierno del Estado ha girado instrucciones a los directores de medios informativos para evitar que se difunda la presentación del libro de Lydia Cacho: Memorias de una infamia. Así mismo fue retirado un espectacular que la Editorial Random House Mondadori contrató para anunciar el evento.
En consecuencia, es muy importante que difundamos la presentación por Internet a todos nuestros conocidos para evitar que estos tipos logren silenciar un libro tan relevante en el que se relata el secuestro de Lydia en Cancún y su traslado y encarcelamiento en Puebla. Por favor, es urgente que difundas este mensaje y nos vemos en la presentación:
Memorias de una infamia
Presentan: Lydia Cacho
Carmen Aristegui
Maru Sánchez Díaz de Rivera
Lorenzo Córdova
Julio Glockner
Sábado 5 de abril a las 12 del día en el zócalo de Puebla

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