lunes, febrero 05, 2007


Son de 30 mil a 50 mil, afirma representante de ONU

Mercenarios, segunda fuerza militar en Irak tras tropas estadunidenses

AFP , DPA , REUTERS

Lima, 2 de febrero. Entre 30 mil y 50 mil mercenarios trabajan en Irak, lo que los convierte en la segunda fuerza militar tras las tropas de Estados Unidos, según un representante de la Organización de Naciones Unidas (ONU), quien señaló este viernes en Lima que cientos de latinoamericanos son contratados en ese conflicto.

El español José Luis Gómez del Prado, miembro del grupo de trabajo de la ONU sobre la utilización de mercenarios, explicó que entre 30 mil y 50 mil personas fueron contratadas en diversas partes del mundo para participar en distintas labores en Irak, en comparación con los 130 mil soldados de Estados Unidos o los 10 mil de Gran Bretaña.

La contratación de estas personas ­incluidos ciudadanos de Perú, Chile, Colombia, Honduras y Ecuador­ es posible gracias a enormes irregularidades y a vacíos legales.

Las declaraciones fueron hechas por Gómez durante la entrega de un informe junto con la colombiana Amada Guevara tras una visita de tres días a Perú, donde el fenómeno ha tenido gran eco en la opinión pública.

De hecho, en el documento entregado se consigna que, "según algunas fuentes de información, más de mil ciudadanos peruanos continúan en Irak prestando esos servicios".

El diario limeño El Comercio publicó hoy un informe sobre maltratos y discriminaciones a los peruanos en Irak por parte de la empresa estadunidense Triple Canopy y sobre cláusulas ilegales en los contratos de renovación de servicio.

Por otro lado, un informe de los servicios secretos de Estados Unidos advirtió que existen signos de guerra civil en Irak y que la inseguridad seguirá deteriorándose si no se toman medidas para revertir la creciente violencia e insurgencia, así como el extremismo político.

El informe, que contradice la posición oficial de la Casa Blanca, según la cual no hay guerra civil en Irak, indicó que el concepto "guerra civil" es apropiado para definir "elementos clave" de la situación que atraviesa la nación ocupada.

En ese sentido, el documento citó como ejemplo la violencia confesional, la movilización de las comunidades chiíta y sunita y los desplazamientos de la población.

Sin embargo, la Casa Blanca consideró que el informe es "duro", pero a la vez "justo", y no contradice la nueva estrategia del presidente George W. Bush para ese conflicto, indicó el consejero de seguridad nacional Steve Hadley.

En el terreno, las fuerzas armadas de seguridad iraquíes informaron que detuvieron desde la noche del jueves a 200 presuntos extremitas en los alrededores de la ciudad santa de Najaf, cuyas autoridades levantaron el toque de queda tras cinco días de violentos combates contra la milicia chiíta.

Soldados estadunidenses dijeron que abatieron a 18 insurgentes en cruentos enfrentamientos en la ciudad sunita de Ramadi, al oeste de la capital.

Mientras, un helicóptero Apache AH-64 estaunidense cayó a tierra y se incendió en la región de Taji, al norte de Bagdad, aparentemente atacado por fuego enemigo, causando la muerte de sus dos tripulantes, informó el Pentágono.

La rama iraquí de Al Qaeda en Irak se atribuyó el ataque contra la aeronave estadunidense por medio de un comunicado difundido en Internet, cuya autenticidad no pudo ser confirmada.

A todo esto, el lunes tendrá lugar en el estado de Washington el juicio marcial contra el teniente general Ehren Watada, quien rehusó enlistarse para la guerra en Irak, porque consideró que rompía las leyes internacionales y la Constitución estadunidense. Podría enfrentar cuatro años de cárcel si es declarado culpable.

Mensaje de sta semana