martes, marzo 13, 2007

CUITLATLAN

Los España y Héctor Alonso rompen con la paz de La Hacienda

Fermín Alejandro García

La tranquilidad en la colonia La Hacienda de la ciudad de Puebla se ha visto perturbada desde octubre del año pasado a causa de que se han empezado a cobrar cuotas ilegales a cambio de servicios públicos, se impuso a un presidente espurio en la mesa directiva de colonos, se pretende dar una mala utilización de predios de uso común y se ha permitido la construcción de algunas viviendas en el margen del río Alseseca. Atrás de dichas prácticas han aparecido dos descendientes del extinto senador cetemista Crescenciano España Morales, así como de Héctor Alonso Granados, actual integrante de la CTM y diputado local.

Y todo esto ha sido posible por la negligencia o la complicidad de Rodolfo Reyes Coria, el director de Desarrollo Político del ayuntamiento de Puebla, quien alentó que de la noche a la mañana apareciera un sujeto llamado Sebastián Hernández Orozco, quien pese a no vivir en La Hacienda y no ser conocido por el grueso de los vecinos, ya anda haciendo cobros ilegales y dice ser el nuevo dirigente de esa zona de la ciudad.

El único merito de este último personaje es que es pareja sentimental de una hija de Crescenciano España Morales, además de ser alentado por otra descendiente del extinto senador. Y por si fuera poco, también es apoyado por Héctor Alonso, quien no hace mucho renunció al PRI y ahora tiene el sueño guajiro de buscar convertirse en el próximo presidente municipal de Puebla.

De hecho este hombre llamado Sebastián Hernández se está dedicando a juntar gente para que el próximo 16 de marzo, en el local del Sindicato de Telefonistas, Héctor Alonso inicie su precampaña para convertirse en el candidato del Partido Convergencia por la Democracia en alcalde de la Angelópolis.

Tal parece que estas anomalías solapadas por Reyes Coria las hace a espaldas de sus superiores, ya que el alcalde de Puebla, Enrique Doger Guerrero, tuvo que pasar el trago amargo el sábado pasado al asistir a La Hacienda y presenciar el enfrentamiento de dos grupos, el del impuesto Sebastián Hernández y el de Alejandra Vázquez Zayas, quien es la auténtica representante de los vecinos desde hace cinco años.

La historia de este conflicto es la siguiente: en esta zona de la ciudad de Puebla, desde el 25 de octubre de 1973 se constituyó una asociación civil llamada Unión de Colonos del Fraccionamiento y Conjunto Habitacional La Hacienda, la cual nunca ha dependido del ayuntamiento de la capital. En esa agrupación se eligió a Alejandra Vázquez como presidente con duración en el cargo de seis años y cuyo periodo vence en 2008. Hasta octubre de 2006, las cosas transcurrían sin contratiempos.

En octubre del año pasado, Rodolfo Reyes Coria, sin ningún argumento de por medio y de manera autoritaria, determinó que no había mesa directiva de colonos en La Hacienda, por lo cual el día 10 de ese mes emitió una convocatoria para elegirla, poniendo un límite de apenas tres días para que los aspirantes a ser el presidente de dicha agrupación de reciente creación cubrieran los requisitos solicitados. De esa manera, de un plumazo desconoció la asociación civil que opera ahí desde hace casi 24 años sin tener autoridad para ello.

A Alejandra Vázquez no la dejaron competir, y el día 18 de octubre de 2006 se realizó una asamblea en la cual fue escasa la presencia de vecinos de La Hacienda, y sin que votaran los asistentes eligieron a Sebastián Hernández Orozco, quien vive en San Francisco Totimehuacán y no es conocido por el grueso de la gente que dice representar.

Una vez que se fraguaron las trampas de Rodolfo Reyes Coria se empezaron a sentir los abusos del nuevo presidente. Por ejemplo, un día el ayuntamiento mandó a arreglar las guarniciones y limpió los márgenes del Alseseca, y Sebastián Hernández exigió a cada uno de los colonos pagar 35 pesos por dicho arreglos.

A quienes tienen algún problema con algún servicio público les cobra de 100 a 600 pesos por “gastos de representación”. Y se ha empezado a rumorar que unos predios de uso común que se pretendían destinar para la construcción de un preescolar o un bachillerato podrían ser entregados a un particular, pues así lo cree oportuno la nueva dirigencia de colonos.

No hace mucho junto al río Alseseca se empezó a tirar cascajo y se inició la construcción de casas, sin importar el riesgo que ello significa. Todo parece que es resultado de las gestiones de los nuevos representantes.

Mucha gente se ha negado a pagar esas cuotas ilegales, pero al mismo tiempo algunas mujeres han cedido como resultado de que ésta es una colonia que tiene muchos hogares habitados por personas de la tercera edad que por su vulnerabilidad caen fácilmente en los engaños de patanes.

O mejor dicho, todo esto es producto de la actuación de funcionarios nocivos, como Rodolfo Reyes Coria.

El PRI antepondrá “criterios éticos” para elegir candidatos

El mayor reto que va a enfrentar el presidente estatal del PRI, Valentín Meneses Rojas, va a ser elegir a buenos candidatos a alcaldes y diputados. Desde hace algunos años ese ha sido el talón de Aquiles del tricolor. Casi siempre que este instituto político se equivoca en la designación de sus abanderados, acaba alimentando las filas de la oposición con priistas que desertan a otros partidos y desde ahí ganan las elecciones.

Ahora, para evitar equivocaciones el presidente del PRI buscará anteponer el criterio de que los abanderados priistas ante todo deben demostrar calidad ética para ser no solamente buenos candidatos, sino sobre todo buenos gobernantes.

Un reto que se antoja muy difícil –pero no imposible– llevar a la práctica y que si se hubiera aplicado años atrás ahora el otrora partido oficial no estaría en la crisis en que está sumergido.

Sin embargo, es loable el esfuerzo de Meneses de querer anteponer la calidad ética de los candidatos. El meollo del asunto es saber cómo se determinará ese criterio. Si el actual presidente lo logra, se habrá casado la rifa del tigre.

Por cierto ahora ya pocos se acuerdan de que Meneses hace unos meses parecía un político en la lona, en la sobra, por el Lydiagate. Ahora es el político más dinámico de la “burbuja marinista”, y si logra sacar adelante la elección de candidatos priistas, seguramente su carrera política no terminará con el sexenio.

Si no lo logra, no pasará de ser un político de esos que están de moda y luego todos se olvidan. Ejemplo: Jorge Morales Alducin

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