miércoles, marzo 21, 2007


CUITLATLAN

¿Todavía tiene presidente el PRI de Puebla?

Fermín Alejandro García

¿Todavía tiene presidente el Comité Municipal del PRI en la ciudad de Puebla? Hago esta pregunta porque este columnista se ha enterado que algunos militantes de dicho partido están esperando audiencia con el dirigente tricolor Humberto Vázquez Arroyo desde febrero y todavía no los atiende. Que quienes lo buscan después de las 16 horas les informan que no despacha en las tardes. Que en las tres últimas semanas casi nadie lo ha visto. Que la última vez que se dejó ver en público fue el viernes pasado en un acto atípico para un líder del PRI, pues estuvo presente en el informe del senador del PAN, Humberto Aguilar Coronado.

Sobre estas ausencias existen dos versiones que explican el comportamiento evasivo del líder partidista. Estas son:

La primera es que Humberto Vázquez Arroyo desde hace varios días está concentrado en la organización de un acto de gran trascendencia, que se espera sea una concentración de masas que dará mucho que hablar durante varios días. Por esa razón ha tenido que cancelar varios asuntos de su abultada agenda para enfocar sus energías a que todo salga bien.

¿De qué se trata ese tan especial acto? Pues de su fiesta de cumpleaños, que al parecer se va a celebrar el sábado a las 2:30 de la tarde.

Los que quieran ser candidatos a diputados no deben dejar de asistir a tan preciado acto; no vaya ser que por no llevar un buen regalo los dejen fuera de la lista de los elegidos para luchar voto por voto en las elecciones de noviembre.

Otra versión que se comenta en los corrillos del partido, y que algunos dan como la más cercana a la realidad, es que como Humberto Vázquez no vive de lo que gana en el PRI dedica una parte importante de su día a realizar actividades productivas que le ayuden a mejorar su ingreso económico.

Y además se dice que lo anterior es una derivación de que el PRI estatal tiene castigado económicamente al Comité Municipal del PRI en Puebla.

Que desde la anterior gestión del Comité Municipal del tricolor, que era encabezado por Jorge Murad, este organismo pasa momentos amargos con proveedores y el personal por no haber dinero para pagar deudas, lo cual ha desmotivado –iniciando por su presidente– a muchos militantes para poner más empeño en la organización de las próximas campañas electorales.

Constantemente se hace un llamado a las organizaciones de jóvenes y de mujeres del PRI a que ya hagan asambleas, reuniones, visitas a las colonias populares, que promuevan al partido, pero nunca les dicen con qué presupuesto.

Una de las dirigentes de las mujeres priistas solicitó audiencia con Vázquez Arroyo en febrero. Cuatro veces lo ha ido a buscar a su oficina. Siempre una malhumorada secretaria le responde que su jefe no atiende en las tardes, que no sabe dónde está y que no le puede decir cuándo la va a recibir.

En una ocasión esta mujer se encontró a Vázquez Arroyo saliendo de la sede del PRI del Centro Histórico. Se acercó a él. Le dijo que cuatro veces lo había buscado. El dirigente con un gesto de hastío únicamente respondió: “Es que no soy omnipresente”. Prometió darle audiencia. Hasta ayer a la media noche eso no había ocurrido.

Con todo esto, surgen las preguntas:

¿Con un dirigente así el PRI quiere ganar las elecciones?

¿O qué, acaso de plano ya se dieron cuenta de que van a perder y ya por eso algunos dirigentes del tricolor no se preocupan por disimular que trabajan?

¿Qué estrategia tiene escondido este partido para intentar triunfar en los comicios de noviembre, porque parecería que no se hace nada para buscar ganar?

¿Qué pasó con los dirigentes del tricolor que se quedaban a dormir en sus oficinas para sacar adelante las campañas electorales a pesar de que antes la oposición no tenía posibilidades de conquistar al poder?

¿Vázquez Arroyo fue al informe de Aguilar Coronado para empezar a hacer migas con el PAN?

¿Será el próximo desertor del tricolor?

¿De qué sirve que ya se arreglaron el gobernador Mario Marín Torres y el alcalde Enrique Doger para frenar su guerra si el PRI está en el marasmo?

¿Será cierto que a Humberto Vázquez no le interesa seguir en el PRI de la capital?

¿Qué ahí quien realmente manda es la secretaria general Sandra Montalvo?

Yo a veces creo que el PRI no quiere ganar.

Más de la tregua

La nueva tregua entre el alcalde de Puebla, Enrique Doger, y el gobernador Mario Marín Torres, no debe verse necesariamente como el fin de las confrontaciones entre ambas partes.

El acuerdo al que llegaron ambos –este martes– para construir conjuntamente obras hasta por mil millones de pesos, que es el doble de lo que originalmente reclamó la Comuna, debe verse con una lógica electoral.

Parece que será la estrategia para que el PRI no salga derrotado en los seis distritos de la capital y la alcaldía.

O por lo menos para que el PRI de nueva cuenta no se vaya al tercer lugar de la contienda, tal como ocurrió en 2006 en las elecciones federales.

Dicen que nada garantiza que los ataques se van a frenar. Se comenta que Omar Álvarez Arronte ya no hay quien lo control y próximamente saldrá con una nueva andanada de acusaciones contra Enrique Doger.

Y que el siguiente episodio de la guerra entre dogeristas y marinistas se manifestará en el intento de la fracción del PRI en el Congreso local de que no se aprueben las cuentas públicas del ayuntamiento de Puebla, luego de que pasen las elecciones.

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