La defensa del petróleo, principal exigencia de la UNT durante la marcha del 1 de mayo

El día de ayer aproximadamente unos 6 mil sindicalizados agrupados a la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) de Pue-bla desfilaron para poder conmemorar el Día del Trabajo, pero más allá de la defensa de sus condiciones laborales se centraron en la defensa del petróleo y el rechazo a la reforma energética planteada por el gobierno federal.

Contingente de la UNT se manifestó durante la marcha por la forma en que el problema de la privatización del crudo perjudica también a la clase trabajadora / Foto: Rafael García Otero

(Carla Toledo)
Puebla, Pue.

Este movimiento independien-te fue desairado por el gobernador del estado, Mario Marín Torres, quien envió en su representación al diputado federal del Partido Re-volucionario Institucional (PRI) Alberto Amador Leal, pero en con-traparte encabezó las celebraciones de los sindicatos oficiales.

Alrededor de las 8 horas, trabajadores de sindicatos como el de la VW, de Teléfonos de México, el del Seguro Social, el Hos-pital del Niño Poblano, de Seglo, de Alcoa, ATL, de la Conalep y de la Comisión Federal de Electrici-dad comenzaron a agruparse pa-ra desfilar por toda la avenida Juá-rez rumbo al zócalo de la ciudad.

Previo a la salida de las dos co-lumnas, el presidente colegiado de la UNT en Puebla, Reyes Hernández Rosas, pidió a los trabajadores, a los legisladores federales y a los gobiernos estatal y federal que hagan una “defensa irrestricta” del petróleo. “De cada peso que proviene del petróleo, alrededor de 60 centavos se dedica a la educa-ción y al sector salud, es por eso que les pedimos que dentro de su ámbito de su competencia se ha-ga una defensa irrestricta de lo que es de los mexicanos: el petróleo, que por ningún motivo puede es-tar en manos de empresarios, ya que es de cada uno de nosotros, de nuestros hijos y de esta gran nación que se llama México”.

Hernández Rosas añadió que los legisladores tienen una alta responsabilidad, y pidió al gobernador Mario Marín que haga eco de la demanda de la UNT, ya que no pueden permitir que la riqueza del país se quede en manos de “los que hoy son los menos, pero los más ricos”, y a los trabajadores les dijo que se lleven el mensaje y lo difundan entre un mayor nú-mero de personas, pues en ellos es-tá que el petróleo no se privatice.

Mientras que el secretario general del sindicato de El Sol de Puebla, Arturo Manzano, señaló que es urgente suscribir un verda-dero pacto social, pues resulta inconcebible que sean los trabajadores quienes carguen con todo el peso social del desarrollo y que sus familias resientan de manera directa las modificaciones de los precios de los productos básicos. Resulta necesario, señaló, que los niveles de gobierno, el sector pa-tronal y las representaciones so-ciales y sindicales establezcan un nuevo compromiso con la clase trabajadora para que tengan me-jores expectativas de bienestar y desarrollo.

Tras los discursos, comenzó la marcha de los sindicalizados, que, en comparación con el año pasado, tuvo una menor participación, aunque en esta ocasión se vio más organizada. Con mantas y peticiones concretas de cada sindicato, los trabajadores gritaron consignas como: “reformas estructurales, negocio de vivales”, “no a la reforma a la ley federal”, “esta marcha no es de fiesta, es de lucha y de protesta” y “es criminal, la reforma laboral”.

Recibí una UNT destrozada: Reyes Hernández

El presidente colegiado de la UNT, Reyes Hernández, minimizó la ausencia del gobernador en el acto de los sindicatos independientes; señaló que “entiende sus ocupaciones” y que no están pe-leados, ya que, dijo, hasta comió con él recientemente.

Al ser cuestionado sobre la po-bre convocatoria, ya que en años anteriores lograban la participación de hasta 40 mil trabajadores, el representante de los sindicalizados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se quejó: “Recibí una UNT destrozada y hoy la estamos reviviendo, estaba dividida y con poco poder de convocatoria”.

Cuestionó que quienes lo an-tecedieron –Fernando Rojas Cris-terna y José Luis Rodríguez Sala-zar– descuidaron sus labores al frente del sindicalismo por atender sus funciones como regidores priistas, lo que, manifestó, no ha sido su caso, ya que rechazó una regiduría en la actual presidencia municipal que encabeza Blanca Alcalá Ruiz.

Trabajadores del HNP exigen al gobierno abrir área de quemados

Encabezadas por Mónica Va-lencia Serrano, enfermeras del Hospital del Niño Poblano (HNP) exigieron a Mario Marín Torres que ponga en funcionamiento la zona de quemados, que fue inaugurada en febrero pasado; aunque el lugar que está perfectamente equipado para atender a niños que-mados, el gobierno no lo ha puesto en operación debido a que el Contrato Colectivo de Trabajo establece que para ello debe contra-tar a personal sindicalizado, ar-gumentaron los trabajadores.

Valencia Serrano concluyó que el gobierno no quiere contratar a 100 sindicalizados más para aten-der el área que actualmente está “bajo llave”. Por ello, tras su participación en el desfile, el grupo de enfermeras acudió a su centro de trabajo para colocar una man-ta en la que exige que se abra el área y las contrataciones.

“Marín, escucha, el HNP está en la lucha” y “de norte a sur, de este a oeste, ganaremos la unidad de quemados, cueste lo que cueste”, gritaban las enfermeras, quie-nes también portaban mantas con la leyenda: “Lic. MMT exigimos se cumpla nuestro CCT, los pues-tos de la unidad de quemados”.

Por esta ocasión los ambulantes no hicieron su agosto

Muy temprano, los ambulantes con puestos de gorditas, tamales y jugos se dieron cita en la avenida Juárez, pero más tardaron en colocar sus mesas que en darse cuenta de que los sindicalizados avanzaban velozmente hacia el centro de la ciudad. La menor participación, pero mejor organización, permitió a los trabajadores cubrir el desfile en menos tiem-po, por lo que los vendedores se quedaron con más de de la mitad de sus productos, y algunos como los que vendían sombreros, se vie-ron en la necesidad de sumarse a la marcha para tratar de “sacar el día”.

Pasado el mediodía, los contingentes se dispersaron, mientras que los ambulantes que llevaban sombreros, comida, agua y dulces, se quejaron porque sus ventas fueron menores a las del año pasado. Lo que permaneció igual fue el caos vial en el centro de la ciudad y en la avenida Juárez.