El sub nipa cuñado

Una priista convencida

juan pablo proal Puebla, Pue., 21 de enero (apro).- Identificada por los organismos de inteligencia mexicanos como hermana del subcomandante Marcos, Mercedes del Carmen Guillén Vicente, “Paloma”, actual delegada del PRI en el estado, sale en defensa de los gobernadores Mario Marín y Ulises Ruiz, y se define como una “priista progresista”.

Mercedes del Carmen Guillén Vicente, mejor conocida como “Paloma”, es la segunda de los ocho hijos que procrearon Alfonso Guillén y Socorro Vicente. A sus 53 años de edad, ha ejercido cargos relevantes en el PRI, partido en el que milita desde su época universitaria.

De representante electoral, “Paloma” escaló peldaños y ha sido, dos veces, presidenta del Congreso de Tamaulipas. Fue procuradora de Justicia de esa entidad, secretaria de Gobernación y actualmente funge como delegada del PRI en Puebla, donde su partido arrasó en las elecciones del pasado 11 de noviembre al obtener 26 de las 41 diputaciones locales.

“Paloma” se define como una “priista progresista”, y sostiene que se mantiene en el PRI, debido a que ese partido “le ha abierto las puertas” y en el militan, dice, “personajes que buscan los principios de justicia social”.

En entrevista con Apro, en su oficina del PRI en el estado, en una de cuyas paredes cuelga un retrato del gobernador Mario Marín, “Paloma” se rehusa a habar de su hermano, el subcomandante Marcos, líder del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

“Es por un pacto familiar”, arguye.

Tampoco se reserva sus comentarios sobre los dos gobernados priistas más polémicos hoy en día, Mario Marín y Ulises Ruiz, este último mandatario estatal en Oaxaca. “La agenda del quehacer es muchísimo más importante que la de la diferencia”, dice.

Como el resto de sus hermanos, “Paloma” fue educada en escuelas jesuitas. Su padre, conocido empresario mueblero de Tamaulipas, le inculcó la lectura de autores clásicos, como “El Príncipe”, de Maquiavelo, y “Los Miserables”, de Víctor Hugo, dos de sus favoritos, dice.

Cuando estudiaba Derecho en la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), “Paloma”, junto con algunos de sus compañeros de esa facultad, se sumó a las filas del PRI. Tenía 17 años de edad.

--¿Por qué escogió al PRI? –se le pregunta.

Responde, casi al vuelo: “Por sus principios, por sus ideales, por su defensa de las causas populares, que aún –subraya--, sostiene. Mi formación siempre ha sido el servicio público. Soy una fiel seguidora de los principios de mi partido, del contacto con las causas populares y de la reivindicación de muchas personas que no tienen acceso a las oportunidades que brinda una nación como la nuestra.

--Cuatro años antes de que usted pasara al movimiento juvenil priista, el régimen perpetró la matanza del 68, ¿Este episodio no la hizo valorar su decisión de militar en el PRI?

“Paloma” explica que no. Afirma que el movimiento estudiantil del 68 se gestó en el Distrito Federal y que ella estudiaba en ese entonces en Tampico. “En el partido había una corriente progresista interesante, donde encontramos cobijo y empezamos a hacer equipo”, indica.

La hermana del subcomandante prefiere reservarse sus juicios sobre los expresidentes José López Portillo y Carlos Salinas de Gortari. Sostiene que la congruencia es un valor muy importante en política.

“El partido no es sólo un dirigente, sino todo lo demás… En esto, como en todo, es el hombre y su circunstancia. He encontrado en mi partido, no importa la tarea que se me mande a desempeñar, puertas abiertas. He logrado hacer la política en la que yo creo dentro de mi partido y seguiré en él”.

Sobre su relación con su hermano Rafael Sebastián, el subcomandante Marcos, “Paloma” ataja: “No quiero hacer ningún comentario. Nosotros tenemos un pacto familiar, que siempre me han respetado los medios. Yo vengo de una familia liberal. Fuimos ocho hermanos, uno de los cuales ya falleció. Es una familia en la que nos respetamos y en la que tenemos nuestros propios acuerdos.

--¿En qué consiste este pacto familiar?

--En mi familia, todos tenemos diferentes actividades, y cada uno, en la suya, ha descollado por distintas razones. Entonces, el acuerdo es que cada quien hablará de lo que hacemos y de su trayectoria.

Sólo acepta sentirse “absolutamente orgullosa de apellidarme Guillén Vicente”.



“Claroscuros”

Por otra parte, “Paloma” asegura que los triunfos electorales del PRI en algunos estados del país, se deben al liderazgo de la dirigente de su partido, Beatriz Paredes Rangel, a la que atribuye la unificación de las corrientes priistas, debido a su “apertura y tolerancia”.

Dice: “Beatriz Paredes es un ejemplo de lo que el político, dentro del PRI, debe hacer. Eso la hace ser congruente e incidir en el cambio de una realidad que es vital para todos los mexicanos. Ella podría ser un ejemplo para estar satisfecha de mi partido”.

Además, destaca la actuación del gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto, y del coordinador de los diputados del PRI, Manlio Fabio Beltrones.

Y cuando se le pregunta su opinión sobre Mario Marín y Ulises Ruiz, cuyos escándalos han llegado a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, señala:

“La percepción es personal. Los militantes del partido podremos no estar de acuerdo, pero no tenemos toda la verdad… Ya lo he declarado y no tengo ambages para decirlo: el 11 de noviembre Mario Marín tiene un referéndum de los poblanos, a los que finalmente es a los que gobierna. La visión que puede tener otro priista de cualquier parte del país puede ser producto de lo que vio en un medio de comunicación. Sin embargo, el compromiso con las causas populares está ahí. Todo mundo tenemos claroscuros”.