miércoles, mayo 09, 2007

Aguas con el arroz de Chedrahui y Soriana

Activistas de Greenpeace, con los ojos vendados, comen arroz ante la  Secretaría de Salud, en protesta porque esta dependencia no informa  qué clase de arroz está entrando a México procedente de Estados  Unidos, luego del escándalo de contaminación transgénica del cereal  estadounidense.

Activistas de Greenpeace, con los ojos vendados, comen arroz ante la Secretaría de Salud, en protesta porque esta dependencia no informa qué clase de arroz está entrando a México procedente de Estados Unidos, luego del escándalo de contaminación transgénica del cereal estadounidense.

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Ciudad de México, México — Las bolsas de arroz marca propia de Soriana, Chedraui y el que se vende a granel en la Central de Abastos están contaminados con arroces transgénicos no aprobados para el consumo humano en México. Esto lo confirmó Greenpeace mediante análisis de laboratorio.

Greenpeace presentó los resultados de las pruebas hechas a diversas marcas de arroz compradas en Soriana (Monterrey, Nuevo León), Chedraui (Pabellón del Valle, Ciudad de México) y a granel (Central de Abastos, Ciudad de México). Los análisis fueron hechos por el laboratorio Genetic ID en los Estados Unidos y resultaron positivos, lo que significa que ese arroz está contaminado con el transgénico experimental LL601 de Bayer, que no cuenta con un estudio ni autorización para consumo humano en México, por lo que la presencia de ese arroz en los anaqueles es, además de insegura y riesgosa, ilegal.

Este arroz transgénico se sembró de manera experimental en parcelas en Estados Unidos. Ni Bayer ni el gobierno estadounidense han podido explicar cómo es que contaminó el arroz destinado al consumo humano. Hasta que se dio a conocer el escándalo de contaminación se autorizó la comercialización de esta variedad en Estados Unidos (sólo está autorizado en ese país). Eso no contuvo la caída de ventas, pues Japón y los 25 otros países cerraron sus fronteras al cereal estadounidense.

“Nuestras peores sospechas se han confirmado: estamos comiendo un arroz transgénico que se fugó de campos experimentales y contaminó los cargamentos comerciales de arroz de Estados Unidos y nos lo han vendido ilegalmente, por lo menos desde agosto pasado”, dijo Gustavo Ampugnani, de la campaña de transgénicos de Greenpeace.

El transgénico LL601 no estaba autorizado para consumo humano; fue hasta que se descubrió la contaminación del arroz estadounidense que se otorgó dicha autorización, la cual sólo está vigente en Estados Unidos. Aunque ese cereal debería permanecer en territorio estadounidense, está entrando a México sin ningún control.

El gobierno mexicano no ha tomado ninguna medida para verificar la calidad del arroz que están comiendo los mexicanos a pesar de conocer el anuncio oficial de la contaminación hecho por el gobierno de los Estados Unidos desde el 18 de agosto del 2006.

Desde un primer momento, Greenpeace solicitó a la Comisión Federal de Prevención contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), de la Secretaría de Salud, que realizara pruebas y tomara medidas urgentes para prevenir la entrada de este arroz transgénico experimental. Cofepris realizó análisis pero no ha querido revelar los resultados.

“La Cofepris está obligada a retirar inmediatamente de los anaqueles el arroz transgénico no aprobado para consumo humano. Asimismo, la Secretaría de Salud debe emitir instrucciones para que se impida la entrada de ese arroz procedente de los Estados Unidos. Lo peor que pueden hacer es legalizar fast track este transgénico para que de la noche a la mañana sea legal en el país”, declaró Ampugnani.

El caso del arroz es un ejemplo de que lo que puede pasar en México si se autorizan las siembras experimentales de maíz transgénico en Sinaloa, Sonora o Tamaulipas, lo que podría ocasionar la contaminación del maíz blanco que se consume en el país.

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