Debemos tener más paciencia de la que imaginamos para esperar a la justicia: Cacho
Martín Hernández Alcántara
Hoy que se cumple tal vez el año más intenso en la vida de Lydia Cacho Ribeiro (ciudad de México, 1963); la periodista que ha sido encarcelada, sometida a tortura psicológica y a presiones de todo tipo y nivel, destaca su principal aprendizaje: “Si algo he aprendido es que tenemos que tener mucha más paciencia de la que imaginamos para esperar a que se haga justicia”.
Su agenda seguramente está llena de solicitudes de entrevistas, y este miércoles será protagonista en muchos de los principales informativos dentro y fuera del país, pero la autora de Los demonios del Edén, el poder que protege la pornografía infantil accedió ayer por la tarde a una entrevista vía telefónica con La Jornada de Oriente para hacer un balance de su caso.
–La Jornada de Oriente (JO): ¿Qué evaluación de las cosas haces en este momento?
–Lydia Cacho Ribeiro (LCR): Me parece que lo fundamental es que a partir del 14 de febrero de 2006 quedó claro quién es Mario Marín y quién es Kamel Nacif. Yo creo que ése es un punto muy importante, porque su contubernio ha quedado muy claro, sobre todo porque ambos están ahora sometidos a investigaciones de la justicia federal.
“Por lo pronto, ha quedado demostrado que Mario Marín le ha mentido siempre a la sociedad poblana. La grabación de sus pláticas con Kamel no dejó lugar a duda de que hubo una concertación de poderes para detenerme y encarcelarme, que pudo haber pasado mucho más. Ahora la Suprema Corte de Justicia de la Nación está averiguando para tratar de demostrar, desde el punto de vista legal, esa concertación”.
–JO: Sin embargo, la atención mediática sobre el caso ha disminuido drásticamente, y en Puebla mucha gente piensa que nada le pasará a Marín. Se ha pasado, en cierta forma, de la indignación a la resignación.
–LCR: Yo, que he vivido 20 años en provincia y comprendo bien lo que le pasa a los medios poblanos, sé muy bien lo que es estar a merced de las presiones de un gobernador, de las amenazas de los poderosos, la forma en que ganan aliados para presionar a los medios con reprimendas económicas mediante recortes a la publicidad o amagos directos. Ahí está, por ejemplo, el caso de los colegas poblanos que fueron golpeados por un guarura del hermano de Mario Marín, lo cual no es más que un despliegue de prepotencia. Es lamentable, pero desgraciadamente es la realidad: los medios de provincia tienen más debilidad que los que se hacen en el centro.
“Ahora la noticia se va debilitando porque los principales implicados han gastado muchos recursos, millones de pesos en medios de comunicación”.
–JO: El secretario de Finanzas de Puebla ha dicho que al menos 184 millones han sido erogados para la defensa de Marín...
–LCR: Pues sí, yo tengo información de que la gente de Marín se ha reunido con directores y dueños de medios de comunicación para ofrecerles millonarios contratos de publicidad a cambio de que su caso no sea ventilado. Los millones los ha pagado por adelantado; algunos han aceptado, y otros no.
–JO: Pero la gente en Puebla parece ya estar resignada. La justicia ha tardado mucho en llegar.
–LCR: Mira, yo sé muy bien que la justicia en México es muy lenta. Creo también que la mayoría de los mexicanos es un poco desesperada. Pero también sé qué hemos dado pasos muy buenos. Tengo información de que a finales de este año el FBI dará a conocer importantes resultados sobre las investigaciones que realiza en torno a esta red de tráfico y explotación de personas en la que participa Jean Succar Kuri.
–JO: Para muchos es inconcebible que después de que el propio Kamel Nacif ha aceptado que todas las conversaciones que han sido conocidas son ciertas, que también lo han reconocido otros implicados en el caso, como Emilio Gamboa Patrón, Fidel Herrera Beltrán y hasta Pablo Salazar Mendiguchía, sea la fecha en que Mario Marín Torres sigue insistiendo en que no es suya la voz de las grabaciones.
–LCR: Pues sí, la verdad es que uno no entiende a veces tanto cinismo, pero las personas como Mario Marín son así: no tienen escrúpulos; por eso es muy grave que sigan gobernando un estado con gente tan noble como la que hay en Puebla. Yo creo que hay que tener paciencia; los peritajes que se han hecho a su voz no dejan lugar a dudas.
Yo considero, estoy calculando que para mediados de este año quedará comprobada la culpabilidad de Mario Marín y de otros altos funcionarios, como el personal del Tribunal Superior de Justicia en Puebla. Todavía no está escrita la historia. Si algo he aprendido de todo esto es que tenemos que tener mucha más paciencia de la que imaginamos para esperar a que se haga justicia.
–JO: ¿Qué impresión tienes de al cercanía de Marín con el Partido Acción Nacional?, ¿sigues pensando que hay un contubernio con Felipe Calderón para brindarle impunidad al gobernador a cambio de que les siga entregando la plaza a los panistas?
–LCR: Mira, me da la impresión de que a Felipe Calderón le hizo una mala jugada su equipo y su partido en un momento muy delicado, porque tengo informes de que quien negoció las elecciones pasadas en Puebla fue el presidente del PAN, Manuel Espino Barrientos, y no Felipe Calderón. Lo que sí quiero dejar claro es lo siguiente: yo no estoy pidiendo que el Ejecutivo se entrometa en el caso, y mucho menos que se incline a mi favor, porque entonces estaría cayendo en lo mismo que me hicieron a mí padecer: un contubernio de poderes. No, lo que estoy pidiendo es que se haga justicia, que haya una investigación imparcial, porque sé que hay elementos suficientes como para castigar a Mario Marín y a sus cómplices.
–JO: Por último, quisiera preguntarte tu opinión sobre la queja que Marín interpuso en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
–LCR: Es un acto de desesperación, carente de cualquier sensibilidad, y está anunciando una pauta para su próxima jugada: Mario Marín intentará hacerse la víctima, pero nadie le va a creer, porque él ha sido un gobernante que ha victimizado (sic) a la sociedad poblana.